Y se terminó el Mundial. Y con el final esperado, aunque a varios pese. Porque Francia, el que eliminó bien a Argentina, se consagró campeón aún no siendo el mejor. Porque la verdad es que no fue superior, salvo con nosotros, a los demás, pero acertó en el arco contrario, pequeño gran detalle, y así fue ganando. Y ayer así le ganó 4 a 2 a este sensacional Croacia, este grupo de luchadores (no da la palabra "guerreros" con ellos después de lo que vivieron en los 90). Como en todo el torneo, los Bleus (azules en fran´cés) se aprovecharon de los errores ajenos, y por ejemplo, los dos primeros goles fueron por tiros libres, uno en contra y el otro con el penal que el argentino Pitana (de buen trabajo) cobró gracias al Var. Después, Pogba, Griezmann y este genio de Mbappé hicieron el resto, pegaron con dos goles más en el momento justo y se llevaron su segundo título, justo 20 años después del histórico del 98. Igual, más allá de cómo terminaron, incluso Bélgica o Inglaterra, lo duro es ver que son harto superiores a la Selección, que echó a este dulce de Sampaoli, pero que me parece, lamentablemente, seguirá con su "cabaret" de idas y venidas. Bueno, así fue el cierre, que pocos querían, pero no depende de los que lo vemos. Así resignadamente, hay que decirlo: y bueno, Francia campeón. Porque acertó y porque hizo las cosas mejor que los demás, incluso Argentina.
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