MARAVILLAS ASÍ ES LA VIDA: CIRCUITO DE MÓNACO

La épica victoria del Lole Reutemann en Mónaco 1980

Todos lo llaman “el Gran Premio con más glamour” del automovilismo. Cómo no si la Fórmula 1 pasa una vez al año su potencia y su circo por las calles del principado de Mónaco, el hogar de los Grimaldi, de los casinos, restaurantes y hoteles de lujo. El circuito, en realidad las calles monegascas hechas circuito, es muy difícil y peligroso, cuesta bastante superar autos por lo angosto. Pero la majestuosidad de su marco lo hacen único. Qué sentirán los pilotos al cambiar un neumático cerca de la princesa Carolina, por ejemplo… El marco, el lindísimo túnel, las curvas, las chicanas, lo hacen un deleite para la vista.

El trazado actual es el siguiente. Una vez rebasada la línea de meta, se encuentra una curva a derechas llamada Santa Devota. Se encara una subida sinuosa Beau Rivage hasta llegar a Casino Square. A partir de allí se produce una bajada hasta la curva a derechas de Mirabeau, se vuelve a bajar hasta la curva cerrada Loews (nombre dado por el hotel Loews Monte-Carlo situado al lado de la curva, hoy en día hotel Fairmont Monte Carlo). Después se traza una doble curva a derechas conocida como Portier para pasar por el túnel que transcurre justo por debajo del hotel Loews. Al salir del túnel nos encontramos con Nouvelle Chicane, que una vez superada llega hasta la curva de Tabac. Una vez realizada la curva se encuentra la chicane de la piscina. Después de esta chicane viene la curva a derechas de La Rascasse (se llama así por un restaurante que hay al lado de la curva) y la de AnthonyNogues. Una vez superadas se encuentra de nuevo la recta de meta. El trazado fue inaugurado en 1920 y, además de la F1, alberga la GP 2 y la Fórmula E. En este fin de semana que el GP de Mónaco vuelve, es una buena excusa para maravillarnos con otro pintoresco paisaje del mundo.