Polonia, el que llegaba al Mundial de vóleibol Italia-Bulgaria 2018 como defensor del título, el mismo al que Argentina dejó sin invicto, volvió a hacerlo. Este domingo derrotó a Brasil en el choque de gigantes de la gran final jugada en Turín. Y de qué forma: 3 sets a 0, si bien apretados, que ratifican el poderío de los polacos. Así como Italia fue reina de los años 90 y Brasil de los 2000, ahora los europeos del este alargan su reinado, con Bartosz Kurek como máximo anotador y mejor jugador. Polonia también había sido subcampeón en 2006, así que disputó tres finales de las últimas cuatro, y se llevó dos, y las dos ante la potencia verdeamarelha. Así concluyó un Mundial que contó con 24 países, entre ellos nuestra Selección de digno papel, a pesar de su puesto final 13, porque bajó al campeón y perdió con Italia sólo por el árbitro, consagrando a viejos grandes y nuevos talentos como describí entradas atrás. Y Así Es La Vida, cuando pocos le dieron importancia, porque el fútbol es lo único pareciera, estuvo allí.
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