JORNADA MUNDIAL: LA NUEVA GUARDIA DEBE SEGUIR

Argentina quedó penosamente eliminado del Mundial de Rusia, noticia nueva y vieja al mismo tiempo, algo maduro desde hace mucho tiempo por tantas razones dentro y fuera de la cancha. ?Y ahora qué?, es la pregunta del hincha.

El fútbol, en una de sus frases bíblicas, dice que siempre da revancha. Es hora de mirar la revancha que aparece en el futuro, aunque hoy sea lejano. En 2019 la Copa América espera que la albiceleste triunfe luego de ya 25 años sin alegrías (sí, un cuarto de siglo). Para ello habrá que trabajar desde bien abajo, bien desde cero. Pero ya se tiene un elemento: los jugadores que tuvieron su primer Mundial. La "nueva guardia" debe seguir formando parte de la Selección, por supuesto con un contexto serio, organizado, concienzudo, tarea de la dirigencia de la AFA.

Pero los que vienen asomando con la camiseta nacional, tengan o no mucha edad, deben ser los primeros a tener en cuenta. Despedida la generación perdedora y de estrellas de propaganda, les llega la hora a ellos. Armani, aún con sus 32 años, Meza (elogiado por el mismo Messi), Tagliafico, Pavón, Lo Celso (¿por qué nunca jugó, porque no quiso Messi?), Marcos Acuña, hasta el pobre Manuel Lanzini que se perdió el torneo por su grave lesión previa. Ellos tienen que llevar la bandera, pesada si las hay, argentina en adelante. Ojalá se haga.

JORNADA MUNDIAL: ARGENTINA, UN EQUIPO SIN PASTA

Para ganar un Mundial, nada más ni nada menos que un Mundial, el Olimpo del fútbol, no sólo hay que tener buenos jugadores, lindo juego, grandes superultrafiguras, grandes goleadores. Se sabe, hincha tribunero, que se necesita algo más. Ese "fuego sagrado" que le llaman que marca la diferencia entre los grandes y los campeones.

Argentina, por supuesto, sigue siendo un ghrande, por algo tiene dos títulos del mundo y tres subcampeonatos, además de otros tantos torneos alrededor del planeta. Pero quedó demostrado que estos últimos años se cayó de jerarquía, se empequeñeció, se convirtió en un equipo ganable. Uno, usando un término liguero, de mitad de tabla. Y en este Rusia 2018 penoso, más allá de todos los líos previos posibles, no tuvo pasta, como hace rato no la tiene, para conseguir el éxito. Esa pasta de campeón del 78, del 86, más allá de que las comparaciones son odiosas.

Llegó demasiado lejos en el Mundial, ésa es su realidad hoy por hoy. Porque lejos nunca puede ser octavos de final para Argentina. Pero esta albiceleste no podía arribar más lejos. Cómo podría cuando va venciendo a Islandia (Islandia, ninguna potencia) y a los cuatro minutos éste le empata, y luego no puede ganar. Cuando Croacia le hace un gol tonto y termina en abultada derrota, con su estrellita de propaganda Messi mirando el piso. Cuando iba 2-1 con este Francia que no había hecho tanto en el torneo, y en un rato lo pierde. Cuando, en 2017, Nigeria lo pasó por arriba y le dio vuelta aquel 02- en Krasnodarsk. Como no fue contra las mismas Super Aguilas el otro día, cuando se triunfó con la garra que pedía la situación.

Pero esta Selección, adentro y afuera de la cancha, no tuvo reacción, no pudo con gigantes ni tampoco con pequeños. Entonces, una vez más, cae al lago del fracaso. Al fracaso de tantas bajas actuaciones en Mundiales, salvo 2014. AL fracaso de las finales de Copa América perdidas con un tal Chile. Al fracaso estrepitoso de quedar tan rápido, cuando faltan quince partidos, de la Copa del Mundo.

TREINTA Y DOS AÑOS DE LA SEGUNDA GLORIA

Gol de Burruchaga a Alemania relatado por Víctor Hugo Morales

Aquel 1986, 32 años atrás, el país ya no estaba bajo órdenes raras, militares, ya no había clima de violencia, ya estábamos en una nueva democracia. Pero había algo en común con 1978: el fútbol argentino era vencedor del mundo. La Selección, tan criticada, mirada indiferente, despedida por pocos, coronó aquel 29 de junio su gran ambición por segunda vez, ahora en tierra ajena, en México, cuando en el majestuoso estadio Azteca logró la proeza de derrotar a la poderosa Alemania en un partido cambiante, emotivo, novelesco. Del 2-0 al 2-2, y en un toque de Diego Maradona, el mago de la Copa, el gol de Jorge Burruchaga y el grito de un pueblo que ni lo había soñado un mes antes. Fue la segunda gloria, luego de la del 78 que también evocamos. Aquella fue la primera y más hermosa, escribimos, pero ésta fue quizás más imborrable por su increíble secuencia. Como sea, otra gloria, más allá de ser del fútbol, para la Argentina. Campeones del mundo, y en democracia.

JORNADA MUNDIAL: FIN DE LA PRIMERA FASE (PUF)

Por fin, tras agotadores 14 días de seguir partidos a full, se cerró la primera fase de Rusia 2018, con Colombia, Japón, Bélgica e Inglaterra como últimos protagonistas. Otra de locos se dio en el grupo de Colombia, que venció a Senegal y aunque Japón perdió con Polonia e igualó en todo con los senegaleses, lo superó por menos tarjetas amarillas, buen criterio de desempate, mejor que el sorteo. En cambio, el H ya estaba definido, pero los belgas le ganaron a los ingleses y mostraron que son los mejores junto a Uruguay y Croacia, los tres únicos con puntaje perfecto en esta primera vuelta. Y ahora, como se dice siempre y yo no estoy de acuerdo, comienza el Mundial, en los octavos de final. Para los octavos tuviste que haber ganado algo antes. Bueno, ahí esperamos a la Selección con Francia el sábado a las 11. Aparte, buenos choques: Uruguay-Portugal, Brasil-México, España-Rusia, Colombia-Inglaterra. Ah: párrafo aparte para nuestro crédito Panamá, que perdió también en su despedida con Túnez, pero valió la pena, canaleros.

JORNADA MUNDIAL: LA CAÍDA DEL IMPERIO ALEMÁN

Y bien al suelo, se cayó la gran Alemania. Era mi favorito, pero ni su peor enemigo hubiera imaginado que se quedaría afuera en la primera ronda de un Mundial, y más siendo campeón del mundo. Pero bueno, un tal corea del Sur les jugó inteligente, les ganó con dos goles en descuento (la moda de este Mundial) y les arruinó la estadía, mandándolos a casa de arranque por segunda vez, la anterior fue en 1938 con la Alemania nazi. Fue otro día de locos en el Grupo F, porque Suecia goleó al mismo México que humilló primero a los alemanes y se llevó la zona, escoltado por los aztecas, que ahora se la verán con Brasil, que obtuvo el E al vencer a Serbia, seguido por Suiza, que tampoco pudo ganarle a Costa Rica, que le igualó con un gol en contra de su arquero Sommer. La verdad, el mejor del torneo es quién: Croacia, el vencedor de nuestro grupo. Y ojo con Argentina, porque si los demás andan así de flojitos, podemos meter la nariz donde más nos importa: en las finales. Mañana se cierra la primera fase y quedan los octavos, esperando a la Selección el sábado con Francia. Colombia va con Senegal, mientras en el otro Inglaterra y Bélgica un partidazo y Panamá busca despedirse con su primer triunfo ante Túnez.

JORNADA MUNDIAL: MESSI, ROJO Y NIGERIA, COMO EN BRASIL 2014

Gloriosa tarde vivió hoy Argentina al ganarle a Nigeria. Y gloriosa fue la coincidencia con lo acontecido entre ambos en el anterior Mundial, el de Brasil en 2014: triunfo albiceleste con goles de Messi y Rojo, como esta gran tarde en San Petersburgo.

Claro que el momento de aquel 25 de junio de 2014 poco tuvo que ver con este 26 de junio de 2018. Era el último partido para los dos como oy, pero venían ya clasificados en ese Grupo F con Bosnia Herzegovina e Irán. Esa vez en el Beira Río de Porto Alegre, con el arbitraje del italiano Nicola Rizzoli, el mismo de la gran final con Alemania, la Selección de Alejandro Sabella ganó 3 a 2 desnivelando tres veces. Messi abrió a los 3 minutos, Nigeria igualó entonces con Ahmed Musa a los 4 y la "Pulga" quebró de fabuloso tiro libre a los 45. Pero en el reinicio Musa puso nuevas tablas, hasta que apareció Marcos Rojo y, también de córner como esta jornada, marcó el 3-2 definitivo. En ese tercer encuentro se lesionó Sergio Agüero y fue reemplazado por Ezequiel Lavezzi, mientras el héroe ex Estudiantes de La Plata jugó de lateral izquierdo, como lo solía hacer.

Con este éxito ante los nigerianos, Argentina se le impuso por quinta vez en cinco enfrentamientos. Los anteriores: 2-1 en Estados Unidos 94, 1-0 en Corea-Japón 2002 y Sudáfrica 2010 y el citado 3-2. Y para cantar lotería, el quinto fue el 2-1 que pone al subcampeón del mundo en los octavos de final de Rusia 2018. Con goles de Messi y Rojo como hace cuatro años. ?Terminará en la final como esa vez?

JORNADA MUNDIAL: !APARECIÓ ARGENTINA Y A OCTAVOS!

Y los chicos se pusieron las pilas. La formación estuvo bien, jugaron buen partido por momentos y, con sufrimiento pero merecidamente, Argentina le ganó a Nigeria y está en los octavos de final, noticia inesperada hasta hace horas, cuando todos lo veíamos volviendo penosamente después de todos sus líos, adentro y afuera. Hoy se acordaron de que están en un Mundial, lo afrontaron como tal y tienen la recompensa. Así tienen que hacer ahora contra Francia, que por más Griezmann, Mbappé y compañía que tenga no es un cuco, aunque sí hay que respetarlo. Por si interesa, Croacia ganó el Grupo D y mandó a los famosos islandeses, de buen debut. Y a la mañana, mientras los franceses empataban el primer 0-0 con Dinamarca, Perú obtuvo su primer triunfo en 40 años sobre Australia, para alegría del gran Ricardo Gareca, que se puede ir contento. Y una más: qué mal Africa, cuatro de sus cinco afuera, sólo queda Senegal. Nunca llegaron a semifinales, ahora parece que tampoco. Grande Argentina, seguí por esta senda. La otra ya es historia.