No pretendo ser padre de nadie, pero es bueno, como lo hago siempre, alertar sobre los malos comportamientos de la sociedad. Sobre todo, de esos que todo el mundo estipula como cbuenos. Cuando uno está comiendo, hay gente malamente exquisita que lo mira cómo lo hace. Y si lo hace mal, se lo remarca, y hasta se atreve a decirle cómo corregirlo. Eso es mala educación, nadie es nadie para hacerlo, y sobre todo en ese importante momento. Es una forma de bulling, de acoso, hasta de no querer, porque encima después te remarcan que lo hacen para tu bien. Sí, será para bien, pero está mal. Sí, está mal. Mal educado. Así que no lo tomemos como corrección, más bien todo lo contrario.
Bienvenidos a Así Es La Vida, un blog de todo un poco, una charla con un amigo, sin tiempo ni espacio, sin intereses, sin estructuras. El caminar de un ciudadano por la vida. Dedicado a mi madre Anita.
lunes, 29 de octubre de 2018
viernes, 26 de octubre de 2018
HISTORIAS DE MIS 15: EL CASSETTE DE BANGKOK-MALAS COMPAÑÍAS
Video con mis audios grabados de Bangkok del 88
Otra con el furor de Radio Bangkok, el disparatado programa de la Rock & Pop. Un gran cassette que se gestó en aquel ‘’partido’’ que su conductor principal Lalo Mir relataba como presentación; allí hice algunos enganches, Jorge D’Amico (el genial amigo de mi hermano Fabián) los escuchó y me pidió que hiciera uno para llevar a la Rock & Pop, más largo y ‘’con planilla de grabación’’, según me ordenó. Y costó bastante; aparte del libreto difícil de armar, todos los días estaba al acecho para grabar partes del programa, propagandas o todo lo que sirviera. Entre los efectos estaban por supuesto el ‘’vómito’’ y el ‘’No entiendo juro que no entiendo’’. Y con eso armé un partido entre Bangkok y Malas Compañías, el espacio de Mario Pergolini a la noche, que no me gustaba, por eso hice que Bangkok ganara 3-2. Curiosamente, al final no lo llevé. Pero, gracias al genial cassette, esos recuerdos quedaron registrados para siempre.
martes, 23 de octubre de 2018
HISTORIAS DE MIS 15: LO QUE ESCRIBÍ CUANDO DEBUTÉ EN RADIO
Y llegó el día. A las 10.30 estábamos en la radio para “precalentarnos” previamente. Yo había dejado grabando el programa para después escucharlo. Llegué a las 10.30. Era una casa con patios y un corredor largo, que conducía a la radio, justamente. En la radio ya estaba el operador, Johnny García. Y el estudio era bastante chiquito, yo había pensado otra cosa, claro. Tapizado con hueveras, para evitar el sonido de la música, con una luz que no alumbraba mucho que digamos, la luz de salida al aire, color roja, el micrófono y la mesa. Cada uno se sentó sobre una silla (más adelante las sillas se reemplazaron por banquitos, y en una ocasión debí sentarme sobre un bafle).
* * *
El programa estuvo bueno. Johnny nos decía “tranquilos, sin nervios, muchachos”, cosa que nos alentó y motivó para nuestra labor. El encargado de presentar el programa es Fernando Tozzoli, que dicho sea de paso lo hace muy bien. Luego vinieron los saludos (Filippi le mandó cualquiera, dijo “espero que el programa dure por muchos años”, nada que ver, viste) y las secciones. Nos trabamos muy poco, contra los pronósticos. De todas maneras salió bien el programa y eso nos incentivó para el segundo. Por supuesto que hubo muchos comentarios de compañeros, no sólo de tercero, sino también de cuarto y quinto y profesores, quienes elogiaron nuestra labor. Y claro, nosotros poco menos que “representamos” a todo el colegio...
* * *
El programa estuvo bueno. Johnny nos decía “tranquilos, sin nervios, muchachos”, cosa que nos alentó y motivó para nuestra labor. El encargado de presentar el programa es Fernando Tozzoli, que dicho sea de paso lo hace muy bien. Luego vinieron los saludos (Filippi le mandó cualquiera, dijo “espero que el programa dure por muchos años”, nada que ver, viste) y las secciones. Nos trabamos muy poco, contra los pronósticos. De todas maneras salió bien el programa y eso nos incentivó para el segundo. Por supuesto que hubo muchos comentarios de compañeros, no sólo de tercero, sino también de cuarto y quinto y profesores, quienes elogiaron nuestra labor. Y claro, nosotros poco menos que “representamos” a todo el colegio...
HISTORIAS DE MIS 15: MI PRIMER DÍA EN RADIO
Video por los 30 años de Hot Dog
Y llegó el día de Hot Dog, mi primer programa de radio, el soleado domingo 23 de octubre en la recordada radio zonal FM Río de Munro. Esa mañana mi papá me levantó y me saludó “dale, Muñoz...”, por el famoso José María, entonces en su apogeo en Radio Rivadavia. Tras terminar mi sección deportiva del Clarín, llegué allá a las 10.30 y me junté con mis dos compañeros de la secundaria del Güemes, Fernando Tozzoli y Alfredo Martín Filippi. Luego de esperar en el salón cerca del estudio, entramos al pequeño recinto que tenía una lamparita, carteles, la mesa con micrófonos y estaba tapizado con hueveras para que no nos afectara el fuerte sonido. Por el vidrio veíamos al operador, sus bandejas giradiscos y la luz roja de salida al aire. Y Filippi se ubicó al lado de la puerta, Tozzoli al medio y yo a la derecha, todos con buenas sillas.
Y a las 11, con nervios e inseguros, arrancamos esa histórica era. Tozzoli hizo la presentación con A Rat in the Kitchen de UB 40 de fondo, luego saludamos (Filippi dijo “espero que el programa dure muchos años”) y fuimos haciendo el resto, yo con aquel pesado resumen de eliminatorias de Europa de Italia 90. Johnny García, nuestro operador, nos alentó “tranquilos, sin nervios, muchachos”. Igual yo estaba nervioso, más cuando veía la luz roja prendida. Y aparte no tenía mucha chispa para hablar, por eso repetía “cosa de locos” o hacía comentarios pobres. Pero me solté y todo salió bien. Ese primer día pasamos entre otros temas Máquina Removedora de Amor de The Cult.
lunes, 22 de octubre de 2018
SERBIAS CAMPEONAS INÉDITAS EN VÓLEY
Como nos ocupamos del Mundial de vóleibol de hombres, lo hicimos con las mujeres, donde las Panteras argentinas se fueron rápido en la primera fase del torneo de Japón. Que llegó a su cierre el viernes pasado con un campeón inédito: Serbia, la república de la ex Yugoslavia, que rompió con los pronósticos y se llevó la medalla dorada al ganarle la final a Italia por 3 a 2 en partidazo. Fue realmente un Mundial de la sorpresa, con barios gigantes afuera antes: Brasil y Rusia en la segunda de las tres fases previas a las semifinales, Estados Unidos cuarto al perder con China, sorprendente tercero. Lo importante es competir. Si lo sabrán las chicas nuestras, que lo hicieron y muy dignamente.
domingo, 21 de octubre de 2018
EL DÍA DE LA MADRE SON TODOS LOS DÍAS
Hoy se celebra, como cada año para este fin de octubre, el Día de la Madre en la Argentina. Pero hoy, como cada "Día de", es uno especial, para homenajear al ser más importante de nuestra vida como se merece, a lo grande, marcadamente, más allá de todo esto de la regalería que tiene nula importancia. Sin embargo, justo en su día, uso una frase de mamá Anita, de las tantas hermosas y profundas que siempre tenía. "El día de la Madre son todos los días", decía con esa voz sonora, clara, con esa sonrisa que le brotaba por los poros y por el alma. Exacto mil por ciento, la madre está cada día, aún cuando nosotros no la vemos. La madre está a cada segundo, aunque (como en mi caso) no esté físicamente. La madre no deja ni un segundo nuestra existencia, aunque tenga que cuidar la suya. Este domingo es su día más especial. Pero este lunes y los que sigan, también serán especiales. Porque ella, la mujer de nuestra vida, lo es. Todos los días.
viernes, 19 de octubre de 2018
HISTORIAS DE MIS 15: CÓMO SE GESTÓ MI PRIMERA VEZ EN RADIO
En esta hermosa serie de especiales a 30 años de mis 15, del año 1988, estos días la emoción crece y el corazón palpita. Se acerca el aniversario número 30 de mi día más importante de aquel 88, cuando el 23 de octubre hice mi primer programa en radio, Hot Dog, junto a mis compañeros del secundario en el Instituto Güemes. Y para ir dándole el lugar en el recuerdo que se merece, bien grande, aquí cuento cómo nació y se gestó el hecho más importante de mi adolescencia.
NACE HOT DOG
Una tarde soleada de octubre, en un recreo en el patio del Güemes cerca del mástil, mis compañeros Fernando Tozzoli y Alfredo Filippi me contaron que habían conseguido un espacio para hacer un programa en FM Río, una modesta radio local de Munro, zona Norte de Buenos Aires, pegada a mi Carapachay. Era los domingos de 11 a 12. Y uno me preguntó si quería hacerlo con ellos. Me gustó la idea, le dije que sí, pero no estaba muy decidido; era toda una noticia para mi inocente vida de esos días. Una noche lo charlé con mis padres y dijeron que lo hiciera. Y al día siguiente les confirmé que lo haría. Así nació HOT DOG, el hecho del 88, allí perdido pero luego inolvidable.
EL NOMBRE
Días más tarde en el recreo ellos me dijeron que habían pensado ponerle Hot Dog. A mí no me caía bien y les sugerí “Aterrizaje Forzoso”, uno que tenía en mente por entonces. Pero no les pareció y decidieron dejar el original, lo que acepté sin problema.
LOS DIAS PREVIOS
Habíamos decidido hacer un programa con un poco de todo. Y el espacio costaba 120 australes (la famosa moneda argentina de entonces) por hora, lo que pagamos con 40 cada uno y con publicidad: Filipi con Brassford SRL, Tozzoli con Tipográfica del Norte y yo con Full, el negocio de ropa para damas de mi papá.
El 20 empecé a hacer mi sección deportiva, por esta vez una recopilación de la semana; copié las eliminatorias europeas del Mundial de Italia 90 del día anterior. Nuestra compañera Alejandra “Monguy” Dib nos deseó suerte en Line Out, otro programa de moda en FM Río. Y el viernes 21 festejé el cumpleaños de mi hermano Leo; ahí mi abuela contó noticias locas que mi otro hermano Fabián me sugirió decirlas el domingo.
PREPARANDO EL DEBUT
El soleado sábado 22 a las 16.30 nos reunimos los tres en mi casa para preparar el primer programa. Por sugerencia de mi mamá, los recibí en mi pieza y corrí el escritorio al medio de la misma; Filippi se sentó contra el ventanal y Tozzoli y yo frente a él, yo en aquella silla Ufo. Y estuvimos casi tres horas con Coca Cola y bizcochitos, las revistas de música, los mensajes que recogíamos en el aula del colegio y el libreto del programa. Cuando los chicos se fueron, yo ultimé mi preparación pasando en limpio los temas y mensajes que me tocaban y mi sección. Así nos preparamos para un momento que nos hizo felices, aunque con nuestros quince no lo pensáramos.
NACE HOT DOG
Una tarde soleada de octubre, en un recreo en el patio del Güemes cerca del mástil, mis compañeros Fernando Tozzoli y Alfredo Filippi me contaron que habían conseguido un espacio para hacer un programa en FM Río, una modesta radio local de Munro, zona Norte de Buenos Aires, pegada a mi Carapachay. Era los domingos de 11 a 12. Y uno me preguntó si quería hacerlo con ellos. Me gustó la idea, le dije que sí, pero no estaba muy decidido; era toda una noticia para mi inocente vida de esos días. Una noche lo charlé con mis padres y dijeron que lo hiciera. Y al día siguiente les confirmé que lo haría. Así nació HOT DOG, el hecho del 88, allí perdido pero luego inolvidable.
EL NOMBRE
Días más tarde en el recreo ellos me dijeron que habían pensado ponerle Hot Dog. A mí no me caía bien y les sugerí “Aterrizaje Forzoso”, uno que tenía en mente por entonces. Pero no les pareció y decidieron dejar el original, lo que acepté sin problema.
LOS DIAS PREVIOS
Habíamos decidido hacer un programa con un poco de todo. Y el espacio costaba 120 australes (la famosa moneda argentina de entonces) por hora, lo que pagamos con 40 cada uno y con publicidad: Filipi con Brassford SRL, Tozzoli con Tipográfica del Norte y yo con Full, el negocio de ropa para damas de mi papá.
El 20 empecé a hacer mi sección deportiva, por esta vez una recopilación de la semana; copié las eliminatorias europeas del Mundial de Italia 90 del día anterior. Nuestra compañera Alejandra “Monguy” Dib nos deseó suerte en Line Out, otro programa de moda en FM Río. Y el viernes 21 festejé el cumpleaños de mi hermano Leo; ahí mi abuela contó noticias locas que mi otro hermano Fabián me sugirió decirlas el domingo.
PREPARANDO EL DEBUT
El soleado sábado 22 a las 16.30 nos reunimos los tres en mi casa para preparar el primer programa. Por sugerencia de mi mamá, los recibí en mi pieza y corrí el escritorio al medio de la misma; Filippi se sentó contra el ventanal y Tozzoli y yo frente a él, yo en aquella silla Ufo. Y estuvimos casi tres horas con Coca Cola y bizcochitos, las revistas de música, los mensajes que recogíamos en el aula del colegio y el libreto del programa. Cuando los chicos se fueron, yo ultimé mi preparación pasando en limpio los temas y mensajes que me tocaban y mi sección. Así nos preparamos para un momento que nos hizo felices, aunque con nuestros quince no lo pensáramos.
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