DÍA DE LOURDES: ALABEMOS A LA VIRGEN

Hoy es 11 de febrero, para quienes vivimos del alma un lindo día. Es el día de la Virgen de Lourdes, que en realidad, para quienes no entienden qué quiere decir "Virgen de", significa la misma Virgen María, sólo que en distintos lugares. En este caso, se recuerda su aparición a Bernardette, una muchacha francesa de 14 años, en 1858 en la localidad de Lourdes, en suelo galo. La cuestión es que bajo esta advocación, se le pide por los enfermos, tanto físicos como espirituales. Eso está bárbaro, María ama que la llamemos. Pero no nos quedemos en eso, también es Nuestra Madre, así que primero que nada agradezcámosle infinitamente el amor y la proteccción que nos da cada día. En criollo, todo lo que Ella se rompe por nosotros. No nos olvidemos, que lo merece largamente. Que así sea.

MIS VERANOS DORADOS: ESOS 11 EN LOURDES

En este lindo apartado de mis recuerdos estivales, hago un alto. Porque no todo en mi vida fue Pinamar y Mar del Plata. Cuando estuve acá, en los 2000 y parte de estos 2010 visité varios 11 de febrero el precioso, celestial santuario de Lourdes en Santos Lugares, provincia de Buenos Aires. Esos soleados y calurosos 11 por la tardecita, en colectivo, con gente de la parroquia Sagrada Familia de Carapachay, le di todo el cariño que pude a la Virgen por todo lo que Ella hizo y hace por mí, especialmente esos años duros. Así gocé y pasé parte de esos veranos, disfrutando el maravilloso paisaje de la inmensa arboleda, los pájaros, el enorme santuario con sus varios lugares, la famosa escalera en redondo y sus 40 y pico de escalones que llevan al templo de arriba, a cuyo lado sólo se ve el cielo. Música, oración, gente llenando bidones para el agua bendita, mucho ruido, pero al fin y al cabo, jornada de alegría, de esa que llena, porque sólo la fe lo logra. Y claro, Ella, La Virgen. Aunque no sea playa, es también precioso recuerdo de verano.

DÍA DE LOURDES, DÍA DE LA VIRGEN

Hoy es un día especial para los que vivimos la fe católica. Y también, para quienes amamos a quienes nos dan amor. Hoy es el día de la Virgen de Lourdes, este 11 de febrero donde se recuerda cuando la humilde Santa Bernardita se encontró con ella en Francia, en 1858. Pero eso, con todo respeto, tiene una importancia relativa. Porque lo importante de que Así Es La Vida recuerde un aniversario es el amor por el ser querido. Y en este caso, Nuestra Madre, la reconozcamos o no, es un ser muy amoroso. Entonces, es el día de María. el día de la Madre. El día en que nosotros estamos junto a Ella con y por amor. Y por ende, transmitimos su amor a los demás, por lo menos intentamos. Y a su vez, Ella nos colma de su amor. Hoy es el día de la Virgen, como todos los días donde Ella nos ama profundamente, pero hoy un poco más especial. Para los que viven de la fe, felicidades y reciban los rayos de sol de la Madre. Y para los que no, incluso para quienes la niegan, lo mismo. Porque, como puse hace un año, María, la Virgen, es la Madre de todos. Y con amor.

DÍA DE LA VIRGEN DE LOURDES: NECESITAMOS ESPIRITUALIDAD

Una especialidad de Así Es La Vida es acordarse de los seres queridos en fechas importantes. Y la Virgen, nuestra mamá del cielo, es uno de los grandes seres queridos. Por lo que este 11, día de la advocación de Nuestra Señora de Lourdes, la saludamos y le agradecemos con muchísima alegría y amor por todo lo que nos ha dado. O, mejor dicho, sólo por haber decidido ser Nuestra Madre, encima en el peor momento de su vida, la muerte de su Hijo Jesús. Y eso que nosotros nos portamos como niños malcriados con Ella, abusamos de su gentileza, hacemos nuestras locuras, no le hacemos caso. Pero así como nosotros nos portamos como niños, Ella nos ama con amor de mamá.

Y realmente, aparte de agradecerle tanto amor y mostrarle nuestra felicidad por ser sus hijos, tenemos que aprovechar y pedirle, que Ella nunca se cansa, sólo necesita que la tengamos en nuestro corazón. Creo que lo más importante, si bien todos los pedidos para Ella son importantes, es suplicarle que llene a este mundo material, loco, descarnado, hipócrita de espiritualidad. Y cuando digo espiritualidad no estoy hablando de los curas o las monjas, eso es un diez por ciento de la vida de fe. Estoy hablando de valores, de amor real, de ayuda al prójimo, de desprenderse del pecado, de dar testimonio de fe con el ejemplo diario, sin hacer cosas grandilocuentes. Este planeta Tierra cada segundo más caótico está enfermo de falta de moral, ética, espíritu, amor. Ahora, el último celular o la ropa de moda sí la tiene y en cantidades. Por supuesto, no soy necio de negar que eso tiene su importancia, “no podemos andar desnudos por la calle” como decía mamá Anita. Pero que eso no nos corra del eje de lo más importante, que es el alma. La Virgen se encarga y encargará siempre de guiarnos este y todos los días de nuestra vida. Pongamos todo en sus manos que Ella lo recibirá con alegría. Saludos a los católicos del blog y a los que no creen, que Ella los bendiga. Porque María es la Madre de todos.