Aún con la tremenda emoción de la despedida de lo que quedaba de la generación dorada del básquetbol, vamos palpitando el cierre de esta noche. Al vóleibol, gran equipo éste de Julio Velasco, también le toca el mal destino de jugar un cruce durísimo. En un rato, el sexteto será bien visitante ante Brasil en el Maracanazinho, buscando la semifinal. Recordemos a modo de buena vibra, el triunfo sobre los brasileños en Seúl 88, el que valió un bronce con Castellani y gran elenco, o aquellos éxitos del 96 y 2000, cuando los eliminamos. Pero eso no es todo, porque más o menos con el comienzo del partido Usain Bolt va por la semi de 200 metros, su segundo pedacito de leyenda. Me voy a cenar rápido, que se viene la emoción de los incomparables Juegos Olímpicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario