Argentina se recuperó de su caída en el debut del Mundial de vóleibol que se juega en Italia y Bulgaria, y este viernes venció fácil, como era de prever, al más débil del grupo A, República Dominicana, por 3 sets a 0. Salvo el primero, donde se llegó a un final 26- 24 insospechado, después fueron dos trámites para el sexteto del gran Julio Velasco, multicampeón con Italia, asistente del surcoreano Sohn en la medalla de bronce de Castellani del 82 y que se irá de la Selección para dirigir en la Liga italiana. Otra vez en Florencia, en el estadio llamado con justicia Nelson Mandela, los experimentados Sebastián Solé y Pablo Crer, junto a los chicos que vienen como Lima, Cavanna y otros, consiguieron el primer triunfo que los ubica ahora terceros detrás de Italia y Eslovenia. Claro que ahora, mañana sábado, tienen que verse la carita con uno de los locales. Italia es muy potente, local y el vóley es un deporte muy lógico, ganan siempre las potencias. Pero, como en todo deporte, como en el fútbol, los partidos hay que jugarlos. Y quién les dice a los Gigantes.
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