viernes, 13 de enero de 2017

MIS VERANOS DORADOS: PLAYA BRISTOL

Y ya que estamos viviendo a pleno el verano, también quiero contarles algunas vivencias propias de esos tiempos preciosos bajo el sol. Hoy empiezo con aquellos tiempos de niñito en Mar del Plata, cuando teníamos nuestro departamento de avenida Lamadrid. Y dentro de él, la playa Bristol, la famosa que aquí cuento cómo disfruté.

La famosa y tremendamente concurrida playa marplatense fue el epicentro de aquellos veranos. Allí estábamos con la vieja sombrilla amarilla con lunares, el bidón de bebidas y los gloriosos vasos de colores con número. Yo jugaba a la pelota si había espacio, si no me divertía haciendo ‘’flanes’’ con los vasitos de Coca Cola o algún castillo. Iba al mar, como toda la vida renegando con mis padres; después me cambiaba el short blanquiazul bajo la sombrilla. Desde ya compraba helado, pirulines o probaba suerte en la rueda de barquillos con poco éxito. Otro clásico de esos soleados días era estar en las carpas de lona verde y el edificio a nuestras espaldas. Y al final nos íbamos por esa salida con una rampa de cemento.

lunes, 9 de enero de 2017

EL DAKAR ME DA FUERZAS PARA CADA DÍA

Algún tiempo muy atrás escribí, sin ver mi archivo del blog, que la vida es un Dakar, que la vida tiene mucho contratiempo jodido tipo el gran rally. Bueno, como cada año, mientras sigo la info de la carrera diariamente en radio, Internet y TV, conozco los líos, penurias, desventuras, dolores que este maratón de la vida, más que una simple carrera motor, acarrea. No sólo los de la competencia en sí, sino el poco dormir, cómo comer bien, el cansancio, la altura, los golpes, los estados anímicos.

Y eso, al tiempo que me gusta por ser fanático de la especialidad, me llama a mi propia vida, a mi día a día mismo. Realmente, el Dakar me da fuerzas y me inspira para encarar y atravesar esos momentos cumbre, límite que de cuando en cuando me tocan a mí como a cualquiera de ustedes. Sea trabajar con un resfrío, tener un golpe, un bajón, un corte de luz, una mentira, un imprevisto, gente que se aleja, haber pasado varias duras como pasé y seguir en carrera, todo lo he experimentado tal cual el rally. Y de él he aprendido a sobrellevar, bancar en criollo, cada uno de esos momentos duros, infelices, molestos, dolorosos. Porque si esos locos que corren a 15 000 metros de altura, que pasan de 0 grado a 50 y al revés, siguen vivos, qué vamos a decir nosotros que estamos mucho más tranquilos en la tierra. Y ojo, también vivimos momentos lindos, felices, alegres como tiene la carrera. Todo tal cual. Creo que en serio, sin metáforas, el Dakar enseña, purifica, alecciona y prepara para cada etapa nuestra, como las de los vehículos. La etapa diaria de la vida.

sábado, 7 de enero de 2017

LAS VACACIONES CON LLUVIA, TODO BIEN

Cuando uno se va de vacaciones, sobre todo las de este tiempo de verano, quiere vivir con buen tiempo. Si es posible, todos los días, y si no, la mayor cantidad que se pueda. Si te vas una semana, querés cinco de buen tiempo. Pero si toca mayoría de mal tiempo, que ha pasado y pasa, recordar aquel verano 94 de la Corriente del Niño, nos volvemos locos, creemos que la vacación se nos fue al tacho, con lo que cuesta una vacación, pagarla y tenerla.

Pero no, no es así. Por supuesto que lo mejor es el buen tiempo, sol, cielo despejado, calor, si fresco no mucho, noches agradables. Ahora, si toca la otra, la de la lluvia, tormenta y demás, hay que saber vivir las vacaciones con el mismo placer. Como apunté antes, el verano es magia, es todo y para vivir todo. Y como escribí alguna vez, una de las cosas más lindas, naturales y veraniegas es justamente la lluvia, esa agua que nos moja pero que nos acompaña. No digo que si llueve siete días, siguiendo el ejemplo, está bárbaro. Pero la lluvia, el fresco, las nubes, el cielo gris, el viento frío de algún día destemplado, es parte de nuestra estadía. Y del verano, por ende. Así que hay que tomarlo de esa forma, como un elemento más. Yo mismo puteaba cuando en mis veranos en Pinamar hacía mal tiempo, había dos días de sol, uno feo, uno medio y medio, una cagada que no había nada de continuidad. Con los años lo veo de otra manera. Ojalá ustedes también, porque al mal tiempo, buen verano.

domingo, 1 de enero de 2017

RALLY DAKAR 2017: LA VUELTA DE LA AVENTURA


Video con el balance del Dakar 2016. Gentileza TV Pública.

A todo esto, mientras sigo saboreando este inicio de año, en pocas horas se viene un nuevo Rally Dakar, que ya es mucho pero mucho más que una simple carrera de vehículos todo terreno. Es casi la vida misma, la aventura de aguantar y seguir hasta llegar a la meta, a veces superando el límite humano. Duro y casi cruel y al mismo tiempo apasionante y trascendente, el Dakar 2017 ya se largó simbólicamente por primera vez en Paraguay, en Asunción, y mañana arrancará allí su primera etapa, temprano como cuando era en Africa, que todos los 1 de enero se internaba en el corazón ardiente del desierto.

Muy pocas tripulaciones este año tomarán parte, menos que anteriores, pero con los mismos protagonistas y equipos. En autos, Stéphane Peterhansel, el francés apodado Messieur Dakar por sus 12 títulos, defiende el de 2016 con su Peugeot, acompañado por Sebastien Loeb y Carlos Sainz, contra las Toyota de Nasser Al Attiyah y Giriel De Villiers y los argentinos, Orly Terranova a la cabeza. El australiano Tobi Price va por retener el de motos, con los portugueses Rodrigues y Goncalves, el chileno Quintanilla, el eslovaco Svitko o los españoles de competidores. Los cuatriciclos no tendrán esta vez a los superclásicos Pattronelli, ganadores de cinco de las ocho ediciones en Sudamérica, y en camiones, el multicampeón de rally argentino Federico Villagra vuelve a subirse a un gigante para buscar algo como el tercer puesto del año pasado, mientras los holandeses se verán con los rusos, DAF contra Kamaz, en un miniclásico del rally. Esperemos que no haya accidentes fatales, ningún lío criticable con la organización y que hasta el 14 de enero, cuando llegue al Automóvil Club Argentino (ACA), el Dakar sea como siempre, un grande del verano.

CÓMO DISFRUTO EL AÑO NUEVO

Hoy estoy muy escribón. Es que el Año Nuevo me inspira, gente. Y realmente es un día muy lindo para mí, más allá de la fe, la Virgen y demás. Es que el Año Nuevo es como un juguete nuevo, como un amanecer, una fuerza que todo lo renueva. Me acuerdo cuando en 2011 llegó el año, me hizo bien porque necesitaba que 2010, cuando se fue mamá Anita, se fuera rápido. Y luego el 2011 me fue bastante bien, levantándome de varios dolores. Ahora que estoy transitando un lindo momento, igual el nuevo año me toca con su magia, es un volver a empezar como Alejandro Lerner, volver a barajar y dar de nuevo. Lo disfruto mucho, y quiero compartirlo con ustedes. Ojalá les llegue el pensamiento.

MARAVILLAS ASÍ ES LA VIDA: LA VIRGEN MARÍA

Por supuesto, si hablamos de Jesús el pasado 25 como Maravilla, cómo no poner a María, su Madre, Nuestra Madre, en esta linda sección de Dios. Porque aunque muchos la desdeñen, la Virgen es la autora de su existencia y, por lo tanto, de todas las bendiciones que Jesús nos da diariamente. Pero para mí Ella misma es una verdadera Maravilla. Como madre, como mujer, como ser humano sin pecado pero con los mismos contratiempos nuestros. Tuvo una vida muy difícil, penosa, marcada por muchas penas, y sin embargo siempre siguió adelante. Tuvo que decir sí al plan de Dios de traer a Jesús al mundo, y lo hizo con y por amor. Y con y por amor, nos ama y cuida a cada uno de nosotros, aún quienes no reparan en ella, que son la mayoría de las religiones, no entiendo cómo sólo nosotros los católicos la veneramos. Lo que más admiro de María, además de su propia existencia y su amor de madre, es su admirable entrega, humildad, sabiduría. Una mujer que a pesar de pasar todas le dio para adelante y vivió plenamente, y ahora nos cobija a nosotros con alegría. Todo a pesar de nuestros errores. Por eso, María, la Virgen, la llena de gracia, La Madre seamos creyentes o no, es una verdadera, auténtica, y aunque quede redundante, maravillosa Maravilla.

FUIMOS LOS MISMOS, HICIMOS LO MISMO" (ARO GERALDES)

Cada vez que vienen estas fiestas 24, 25, 31, primero, me acuerdo de la humorada de mi amigo y colega periodista Pablo Aro Geraldes. En 1994 le consulté al pelilargo cómo la había pasado con su familia. La respuesta fue contundente y justa: “Y, bien, qué sé yo, fuimos los mismos, comimos lo mismo, tomamos lo mismo, hicimos lo mismo…”, decía con tono risueño. La verdad, tiene 100 por ciento de razón. Es tremendo, parece que fuera con papel de calcar las fiestas, anoche ahí en la terraza yo veía los fuegos y cohetes y me decía “esto es lo mismo del año pasado…”. Bueno, una aneda simpática de Año Nuevo. Y eso que anoche la lluvia le puso su toque distinto.