PLAYA BRISTOL
La famosa y tremendamente concurrida playa marplatense fue el epicentro de aquellos veranos. Allí estábamos con la vieja sombrilla amarilla con lunares, el bidón de bebidas y los gloriosos vasos de colores con número. Yo jugaba a la pelota si había espacio, si no me divertía haciendo ‘’flanes’’ con los vasitos de Coca Cola o algún castillo. Iba al mar, como toda la vida renegando con mis padres; después me cambiaba el short blanquiazul bajo la sombrilla. Desde ya compraba helado, pirulines o probaba suerte en la rueda de barquillos con poco éxito. Otro clásico de esos soleados días era estar en las carpas de lona verde y el edificio a nuestras espaldas. Y al final nos íbamos por esa salida con una rampa de cemento.
PASEO POR LA RAMBLA
Un paseo obligado por la pintoresca avenida cercana al mar que frecuentábamos muchos atardeceres. Allí una tarde un tipo disfrazado de “momia” me levantó en brazos.
PLAZA MITRE
La espectacular plaza de alquiler de rodados en el centro de Mar del Plata. Rodeada de bella arboleda y pasto, tenía estacionados en un cordón los más diversos y fabulosos kartings a pedal, bicicletas simples y en tándem, todos numerados, en los que mucha gente (la mayoría chicos) transitaba un gran espacio de asfalto. Entre ellos yo, que no podía parar de tan divertido que estaba. Un paisaje decorado con el monumento a Mitre y una linda fuente donde pululaban lanchitas a pila. Un lugar hermoso, muy familiar, una gloria de mis primeras felices vacaciones.
EL FARO
Un bellísimo paisaje el del Faro, que recorríamos en auto al igual que los hermosísimos acantilados.
SIERRA DE LOS PADRES
El más bello de mis vacaciones en la Feliz. Un lugar paradisíaco, lleno de naturaleza y con arboleda, donde anduve a caballo con la yegua ‘’Irma’’ rodeado de pinos. Y paseé por una zona que hasta tenía canchas de fútbol.
BICI ACUATICA
Un divertidísimo paseo en un lugar de gran belleza natural. Di varias vueltas en esa bicicleta blanca con forma de cisne por un inmenso lago una mañana nublada. Me acuerdo que la bicicleta doblaba sola, por lo que disfruté mucho más ese día.
EN TORREON DEL MONJE
Otro bonito paseo al histórico monumento al que fui una nublada mañana.
Bienvenidos a Así Es La Vida, un blog de todo un poco, una charla con un amigo, sin tiempo ni espacio, sin intereses, sin estructuras. El caminar de un ciudadano por la vida. Dedicado a mi madre Anita.
Mostrando entradas con la etiqueta Mar del Plata. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Mar del Plata. Mostrar todas las entradas
sábado, 22 de febrero de 2020
viernes, 10 de enero de 2020
HISTORIAS DE INFANCIA: MIS VERANOS EN MARDEL
Estos primeros años pasé veranos inolvidables en la bella Mardel, donde teníamos nuestro bonito departamento de avenida Lamadrid. Aquellas vacaciones también marcaron grandemente esta etapa y estuvieron llenas de inocencia. Era el lugar de la playa Bristol, la heladería Gianelli, la Rambla, el Faro, la increíble Sierra de los Padres, la Plaza Colón y aquella espectacular Plaza Mitre con los kartings. Y también de la juguetería de la otra cuadra con los autitos en la vidriera, de los videogames de F1, de los grisines hojaldrados de cada mañana y, por supuesto, de los tentadores Havanna. Una época preciosa dentro de otra.
martes, 9 de enero de 2018
HISTORIAS DE VERANO: SEÑORA CARITATIVA
Esta la cuento aparte porque merece aparte. Esto fue en la gloriosa plaza Mitre de Mar del Plata, copadísima con kártings de todo tipo. Andando con el mío, de repente le erré al pedal y se me enganchó el cordón de mi zapatilla, con tanta mala suerte que no podía sacarlo y me quedé ahí parado. De la bronca me puse a llorar. Justo en eso pasó una señora, se acercó y ME DESATO EL CORDON. Menos mal, porque si no me quedaba a vivir ahí...
HISTORIAS DE VERANO: PERDIDO Y PIE QUEMADO
Llegó otro verano, la mejor estación del año por lejos, aunque dure poco. Por eso hay que aprovecharlo a fondo. Por eso, les quiero empezar a comartir historias mías de mis pisadas por el verano, desde mi plena infancia hasta mi adultez. Arranco con historias de aquellos años en Mar del Plata. Como la típica de este tiempo: para leer bajo la sombrilla.
* PERDIDO EN LA PLAYA. Tal cual dice el subtítulo, una tarde ME PERDI EN LA PLAYA y por suerte después me encontraron, siendo aplaudido -como es costumbre en estos casos- por todo el balneario. Y pasando un tremendo verano...
* PIE QUEMADO. Salía de la playa Bristol DESCALZO (¡!) y cuando iba por la rampa de salida, mi pie derecho pisó UNA COLILLA DE CIGARRILLO ENCENDIDA. El resultado: quemadura de quinto grado. Que encima me duró casi una semana...
* INVASION DE CANCHA. Una tarde estaba en la playa marplatense, como se sabe una de las más concurridas. Tanto que en un momento, cuando quise levantarme para jugar a la pelota, NO HABIA ESPACIO Y TUVE QUE QUEDARME...
* NOS TAPO EL AGUA. Un mediodía en la playa hubo baja marea, tanto que de repente el mar LLEGO HASTA DONDE ESTABA LA GENTE, bañándonos a todos...
* PERDIDO EN LA PLAYA. Tal cual dice el subtítulo, una tarde ME PERDI EN LA PLAYA y por suerte después me encontraron, siendo aplaudido -como es costumbre en estos casos- por todo el balneario. Y pasando un tremendo verano...
* PIE QUEMADO. Salía de la playa Bristol DESCALZO (¡!) y cuando iba por la rampa de salida, mi pie derecho pisó UNA COLILLA DE CIGARRILLO ENCENDIDA. El resultado: quemadura de quinto grado. Que encima me duró casi una semana...
* INVASION DE CANCHA. Una tarde estaba en la playa marplatense, como se sabe una de las más concurridas. Tanto que en un momento, cuando quise levantarme para jugar a la pelota, NO HABIA ESPACIO Y TUVE QUE QUEDARME...
* NOS TAPO EL AGUA. Un mediodía en la playa hubo baja marea, tanto que de repente el mar LLEGO HASTA DONDE ESTABA LA GENTE, bañándonos a todos...
domingo, 15 de enero de 2017
MIS VERANOS DORADOS: BELLEZAS DE MAR DEL PLATA
Y ahora cuento de varios momentos chiquitos pero únicos de mi vida veraniega en Mar del Plata, la Feliz que cobijó mis primeros años bajo el sol.
paseo por la rambla
Un paseo obligado por la pintoresca avenida cercana al mar que frecuentábamos muchos atardeceres. Allí una tarde un tipo disfrazado de “momia” me levantó en brazos.
PLAYA GRANDE
Otra linda zona, más alejada del centro, que recuerdo por un balneario con unas piletas grandes.
EL FARO
Un bellísimo paisaje el del Faro, que recorríamos en auto al igual que los hermosísimos acantilados.
BICICLETA ACUÁTICA
Un divertidísimo paseo en un lugar de gran belleza natural. Di varias vueltas en esa bicicleta blanca con forma de cisne por un inmenso lago una mañana nublada. Me acuerdo que la bicicleta doblaba sola, por lo que disfruté mucho más ese día.
PLAYA SAN REMO
Una desconocida a la que fuimos una tarde con NUESTRA CONOCIDA Marcela Ortiz, que otra vez vino con nosotros. Curiosamente, nos trasladamos en colectivo... Y allá estuve en el agua un rato, pero el lugar no me gustó por lo accidentado de su suelo.
AUTITOS PLAYEROS
Con el auge de la Fórmula 1, los autitos de plástico con todos sus detalles eran un clásico. Así empecé con un par de ellos y las pistas en la arena, que incluían túneles, rampas y curvas. Tuve un Renault amarillo (el de Arnoux) y el Williams del Lole Reutemann.
EN TORREÓN DEL MONJE
Otro bonito paseo al histórico monumento al que fui una nublada mañana.
paseo por la rambla
Un paseo obligado por la pintoresca avenida cercana al mar que frecuentábamos muchos atardeceres. Allí una tarde un tipo disfrazado de “momia” me levantó en brazos.
PLAYA GRANDE
Otra linda zona, más alejada del centro, que recuerdo por un balneario con unas piletas grandes.
EL FARO
Un bellísimo paisaje el del Faro, que recorríamos en auto al igual que los hermosísimos acantilados.
BICICLETA ACUÁTICA
Un divertidísimo paseo en un lugar de gran belleza natural. Di varias vueltas en esa bicicleta blanca con forma de cisne por un inmenso lago una mañana nublada. Me acuerdo que la bicicleta doblaba sola, por lo que disfruté mucho más ese día.
PLAYA SAN REMO
Una desconocida a la que fuimos una tarde con NUESTRA CONOCIDA Marcela Ortiz, que otra vez vino con nosotros. Curiosamente, nos trasladamos en colectivo... Y allá estuve en el agua un rato, pero el lugar no me gustó por lo accidentado de su suelo.
AUTITOS PLAYEROS
Con el auge de la Fórmula 1, los autitos de plástico con todos sus detalles eran un clásico. Así empecé con un par de ellos y las pistas en la arena, que incluían túneles, rampas y curvas. Tuve un Renault amarillo (el de Arnoux) y el Williams del Lole Reutemann.
EN TORREÓN DEL MONJE
Otro bonito paseo al histórico monumento al que fui una nublada mañana.
lunes, 8 de febrero de 2016
RIVER-POLONIA: 30 AÑOS DE UN SHOW DE VERANO
Video del inolvidable 5-4 de Mar del Plata
Más que un simple partido de fútbol amistoso, fue un espectáculo de verano. Como los que por cada estío suelen engalanar a la bella Mar del Plata. Aquel 8 de febrero de 1986, el excelso River Plate de Héctor Veira y la fuerte selección de Polonia brindaron el mejor encuentro de la historia de los tradicionales torneos preparatorios en Argentina. Golazos, vuelcos en el marcador, juego de alta categoría y un broche de oro de Enzo Francescoli fueron los momentos de una noche imborrable.
Ese verano del 86, en medio del campeonato de Primera División, en “la Feliz” se disputaba una nueva edición de la prestigiosa Copa de Oro, que en este caso fue un triangular entre River, Polonia y Boca Juniors. Tras vencer a los boquenses 1 a 0, el conjunto de Europa Oriental (que se afilaba rumbo al Mundial de México) enfrentó al gran millonario del “Bambino” Veira, que entre 1985 y 1986 se llevó títulos locales, sudamericanos y el del mundo, con una constelación de estrellas como Pumpido, Ruggeri, Héctor Enrique, Américo Gallego, Norberto Alonso y Francescoli. El equipo argentino, además, había dado días antes una exhibición ante Argentinos Juniors por la liga ganando 5 a 4. Ante casi 30 000 personas en el estadio mundialista José María Minella, River se puso en ventaja por Alonso a los 37 minutos del primer tiempo, frente a un equipo polaco con 10 hombres tempranamente por la expulsión de Przybys a los 21. Y con esa diferencia se fueron al descanso.
Los de Antoni Piechniczek salieron con todo en el reinicio y Dziekanowski igualó a los 3 con un formidable tiro libre. Pero enseguida, a los 8, una lujosa combinación entre Alonso, Roque Alfaro y Francescoli fue culminada por el uruguayo con gran definición para el desnivel. Sólo un instante duró el gran festejo por el golazo, ya que Dziekanowski empató de penal. A los 22, tras centro del delantero, el defensa Roman Wojcicki colocó arriba a Polonia, que aprovechó su momento y a los 27 Buncol capitalizó un mal despeje de Pumpido y con remate bombeado estiró la diferencia a 4-2. A falta de 18 minutos, todo parecía sellado. Más cuando a los 32 Borelli y Wojcicki fueron expulsados y el local quedó con nueve hombres contra diez.
Allí apareció el superofensivo Riverde Veira y con amor propio y muy buen juego fue remontando la cuesta. A los 38 descontó Francescoli a pase de Ramón Centurión, el centrodelantero de larga trayectoria que a los 42 cabeceó un córner ante una mala salida del guardameta Wandzik y marcó un 4-4 que ya era espectacular. Pero faltaba la frutilla de la torta. Y sólo un minuto después, a los 43, Ruggeri bajó la pelota de cabeza para Francescoli, que la paró en el pecho y con una inolvidable chilena hizo estallar al estadio. Como en una película, como en una fábula, River daba vuelta brillantemente una desventaja de dos goles y se imponía por 5 a 4.
Cuatro días después el conjunto de Veira le ganó el superclásico a un frágil Boca Juniors por 1 a 0 y se quedó con la Copa de Oro. Polonia, en tanto, continuó con su viaje rumbo al Mundial, en el que quedaría eliminado en octavos de final por Brasil con una goleada 4-0 y la despedida de las Copas del Mundo del mítico Wladyslaw Zmuda. Pero ambos ya habían sido campeones de lo más importante: el buen espectáculo, el fútbol de alto nivel. Fue un verdadero show de verano.
FICHA DEL PARTIDO
Copa de Oro Mar del Plata 1986, segundo torneo triangular
8 de febrero de 1986
River Plate 5-4 Polonia
Alonso 37´ (RP), Dziekanowski 48´ (P), Francescoli 51´ (RP), Dziekanowski penal 55´, Wojcicki 67´, Buncol 72´ (P), Francescoli 83´ y 88´, Centurión 87´ (RP).
Estadio: José María Minella (Mar del Plata).
Arbitro: Abel Gnecco (Argentina).
RIV: Pumpido; Gordillo (Villazán 85), Borelli, Ruggeri, Montenegro; Enrique, Gallego, Alonso; Amuchástegui (Karabín 89), Francescoli, Alfaro (Centurión 77). DT. Héctor Veira.
POL: Wandzik; Pawlak, Wojcicki, Przybys, Matysik; Urban, Baran, Buncol; Tarasiewicz, Dziekanowski (Balzik 85), Okonski. DT. Antoni Piechniczec.
domingo, 24 de enero de 2016
BOCA-RIVER: OTRO ESCANDALETE
Las expulsiones y el escándalo del superclásico
Lamentable. Preocupante. Vergonzoso. De mediocres, bien de la mediocridad argentina. Una vez más, como hace tiempo biene pasando de forma alarmante, Boca y River dieron un espectáculo que de superclásico no tuvo nada y sí de violencia, de esa maldita mentalidad de “jugarse la vida en los clásicos” tan enraizada entre nosotros. Para qué, digo yo, escribí tanta previa, con historia, videos, estadísticas, en definitiva, destilé la misma pasión que cada protagonista del clásico. Para qué si después, uno y otro llevaron a cabo una velada de boxeo o de kick boxing que de fútbol, que dicho sea de paso deja mucho que desear más allá del argumento pretemporada. Cinco expulsados, tres de ellos de un Boca lastimoso en su presencia, que ya lleva cinco en dos partidos; muchas faltas, prepotencia, pelea y el lío faltando unos minutos entre Maidana y Carlos Tévez que derivó en ese escandalete con un elenco estelar y grandes actuaciones, por supuesto muy lejos del lindo teatro en Mar del Plata. Como en los duelos de la Copa Sudamericana 2014, como el escándalo de la Libertadores 2015, como los partidos locales, Boca y River dieron otra pésima imagen, que de “machos” no tiene nada, más bien todo lo contrario. Jugadores de pésima conducta, que se creen reyes por ser futbolistas, que ponen en aprietos al mejor árbitro del mundo, y eso que anoche Patricio Loustau los tuvo a rienda corta. Qué fácil es criticar al juez si los protagonistas parecen niños peleándose en un potrero o en un patio de colegio. Y además, para qué hablar de violencia en los estadios, si la violencia la ponen los de adentro. Si no se comportan ellos, qué esperar de la sociedad que los rodea. Fuimos a ver fútbol, debuts, goles, tensión y emoción bien pensada. Fuimos, por ejemplo, a ver cómo volvía Daniel Osvaldo, cómo debutaban Jara y Silva, lo de Nacho Fernández en River. Terminamos viendo golpes, fricciones, poco fútbol y malo y otro escandalete vergonzoso para dos clubes de semejante categoría. Ah: era un amistoso.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)