sábado, 29 de febrero de 2020

ORIGEN DEL AÑO BISIESTO, UN LÍO DE SIGLOS

Estamos en la belleza del verano, arena, playa los que aún andan, ciudad los que no. O estamos en nuestro mundo. Entonces se nnos pasa cuestiones como que hoy es un día atípicio, raro. Porque hoy, como ven encima del título, es 29 de febrero. Una fecha que se repite cada cuatro años. ¿De dónde o cuándo viene? Pufff, es un lío. Una versión señala que el emperador romano Julio César adaptó el desfasado calendario egipcio a las necesidades del Imperio y aparte de ordenarlo, le agregó un día en febrero antes de las calendas, como se llamaba al primer día de mes, antiquísima tradición romana. Así fueron años largos hasta que en 1582 el Papa Gregorio XIII estableció el calendario actual, en honor a él justamente llamado gregoriano. Otra versión sostiene que el año bisiesto se establece para corregir la lenta traslación de la Tierra alrededor del sol. Y se toma un año cada cuatro a partir de los terminados en 00, que no se cuentan bisiestos. Dicen que siglos antes los egipcios tenían un calendario y pudieron corregirlo pero no lo hicieron por diferencias políticas. Sí, el bisiesto es un lío matemático. Y encima, aunque parezca irónico, de siglos.

NAHUEL: UN CACHO DE CULTURA, ARGENTINA



Video: Avanzar de Nahuel Pennisi, ganador en Viña del Mar 2020

Es el permanente deseo de Así Es La Vida. Siempre en mis entradas critico bregando por una sociedad mejor. Y cada día, la respuesta que recibo (recibimos varios) es peor y peor. Entonces redoblo la apuesta y pido que se le dé más importancia a la cultura en esta revuelta Argentina. El triunfo de Nahuel Pennisi en el certamen folklórico de Viña del Mar este viernes tiene que ser un trampolín para el devaluado arte, más que el peso. No sólo que el arte debe contar más chances por ejemplo para músicos, sino que es bienestar para esta insociable sociedad. Esto de que la TV o la radio son tan ordinarias, vacías, mal educadas, groseras, desprolijas se tiene que empezar a cambiar. Que lugares y productores den espacio a gente que valga algo como Nahuel, en lugar de las tonteras que vemos y escuchamos. Y también, esto lo sufro en carne propia, que los bares o sitios de eventos dejen de medir con dinero o pequeñeces las oportunidades para artistas. Qué es eso de "no me trajiste gente, no te doy fecha", o "necesitamos bandas, no solistas". Pero claro, un Diego Yamus solo, un Así Es La Vida, que no es Revista Caras, no lo va a cambiar. Este cambio de valor debe partir de todos, empezando por el siempre disfrazado Estado, siguiendo por los transmisores, los comunicadores, los mismos artistas. Que éstos dejen de esos mensajes politiqueros baratos, de esa clase baja y se ocupen de su arte. Como decía el entrañable Clemente, que haya un "cacho" de cultura, Argentina. Entre todos podemos.

NAHUEL PENNISI, CAMPEONAZO EN VIÑA 2020


Video del instante en que Nahuel es declarado ganador en el Festival

Se veía venir y vino. Con su calidad innata, con su excelsa música, con esa voz afinada, emotiva, Nahuel Pennisi venía ganando ampliamente la competencia folklórica del Festival de Viña del Mar. Y lo rubricó este viernes llevándose el título de mejor intérprete, buen dinero y lo mejor, el concurso que gracias a él Argentina obtiene por segundo año seguido, tras lo de Destino San Javier en 2019 que informáramos. Así el genial cantautor venció a Chile y Colombia, al exigente público (apodado "el monstruo" por su carácter) y a todos sus obstáculos, que no hace falta replicar. Ahora Nahuel seguirá deleitándonos en bares, estadios, países, continentes. Seguro en el precioso programa Morfi de Telefé será invitado. Pero ya se consagró ante el mundo, no sólo en Latinoamérica. Grande Nahuel, grande Argentina culta.

viernes, 28 de febrero de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: VUELTA DE VERANO AL ATARDECER

El 16 de febrero DE 1985, por la tarde, volvimos de otra paradisíaca vacación en Pinamar a Buenos Aires. Y en la ruta bajamos en un lugar donde tomé un rico helado de chocolate y vainilla parado al lado del auto al aire libre, mientras miraba con nuestro gran amigo Horacio el bellísimo atardecer naranja y comentaba de gruesas nubes blancas que lo cruzaban.

CUBA Y VENEZUELA SON BELLEZAS

Tantas veces muchos argentinos hemos señalado a Cuba y Venezuela con mirada negativa. Y con razón, porque sus respectivos regímenes nada políticos repercutieron acá, donde se intentó sutilmente copiarlos, ustedes saben. Es una gran pena. Porque Cuba y Venezuela, Venezuela y Cuba, son dos países preciosos, dos regiones increíbles de nuestra Tierra y de nuestra golpeada América. Son dos destinos turísticos muy mirados por nosotros, a la par de nuestra mirada negativa. Son gente cálida, son naturaleza puramente encantadora, son música, arte, deporte, salud. Son ciencia, son ciudad y playa, son isla y avenidas. Son maravillas como las de nuestra sección, no sólo por lo visual. Es cierto, también son dominados por esos señoritos, para decirlo de alguna manera. Pero eso no nos debe quitar todo lo bueno de estas dos reales perlas del planeta. Estas dos bellezas, aunque estropeadas, lo siguen siendo.

MARAVILLAS ASÍ ES LA VIDA: BAR

Uno llega de la agitada calle de este 2020 argentino. Entra, se sienta y pide algo. Lugar chico y acogedor, fresco de clima y cálido de ambiente. Poca gente, después se van juntando. Se alzan voces, pero uno se concentra en la agradable música de fondo. Luego come y bebe a sus anchas, contemplando el paisaje. Sí, paisaje. Porque un bar lo tiene. Esa mezcla de tranquilidad y ruido, de frescura y calidez, de música y palabras. De aromas, de gustos, de gente. Lo que predomina es la distensión, propia de estar bien atendido no sólo por los encargados. El bar es alegría interna, tal vez melancolía, seguro nostalgia, es el refugio del artista, del bohemio, del más intelectual, del tipo, del hombre. En un mundo de pocos metros cuadrados, pasan muchas sensaciones. Tanto que uno se maravilla, bien para considerarlo ídem. Y aunque sea así siempre, es bien de verano.

jueves, 27 de febrero de 2020

PIMPINELA EXCELSO EN VIÑA DEL MAR



Video de Por la Familia en Viña

Como habíamos contado, el legendario dúo Pimpinela fue uno de los dos artistas argentinos invitados del Festival de Viña del Mar, Chile (el otro es Luciano Pereyra, que se presenta esta madrugada). Y realmente, valió la pena quedarse escuchando la transmisión oficial hasta pasadas las 3 de la mañana. Joaquín y Lucía Galán deslumbraron al exigente público local con un show más que excelso. Cantaron con lujosa clase sus singulares éxitos como Olvídame y Pega la Vuelta, se sobrepusieron a problemas de audio que afectaron a los demás números, sortearon un imprevisto acortamiento de su sow a 45 minutos con maestría y categoría. Y lo mejor de lo mejor, homenajearon a su madre fallecida hace un mes con un sentido discurso de Lucía, mientras se difundió un video de un antiguo presentador del festival entrevistando a la madre. Luego hicieron subir a los hijos de cada uno para el bellísimo tema Por la Familia, donde la gente coreó espectacular. Y qué decir de los famosos temas de protesta como el citado o como Me Mentiste, donde ambos dejaron lucir su genial estilo e interpretación, haciendo creer a uno su supuesto enojo. Si bien no es mi estilo de música, vibré con ellos. Es que da gusto escuchar un poco de cultura, de calidad entre tanta porquería de hoy, no sólo musical. Verlos tan señores, desde el show a las declaraciones, desde su homenaje a la conexión con el público. Pimpinela se llevó una Gaviota de Plata y otra de Oro, tradicional distinción a los grandes. Por si hacía falta, porque son excelsos. Y lo demostraron con creces en Viña del Mar.