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viernes, 25 de diciembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: AQUELLOS REGALOS DE NAVIDAD

En este último capítulo de 2020 de esta sección hermosa que Dios creó, qué otra cabe que recuerde con esta Navidad que vivimos hoy aquellos regalos, esos tesoros y atracciones mayores de toda niñez. Inolvidable uno por uno, con algún intervalo por circunstancias familiares. En el 79, 6 añitos, el autito verde lima a fricción. Tras el no registro del 80 y la no fiesta 81, el 82 me trajo la fabulosa caja de lotería Ruibal con 90 bolillas y el significado de cada número en la caja. El 83 de aquella misa en Sagrada Familia de Carapachay recibí el toallón con la imagen de Vilas y el cassette (sí, cassette) Superestrellas Volumen IV, con Mentira de Valeria Lynch y Vamos a la Playa de Donald de emblemas. Más música en el 84, y qué: La Misa Criolla. Y el cierre de Papá Noel de mi infancia, su trineo vino cargado: 1985 fue el de un globo terráqueo de metal, el espectacular juego de mesa Viaje a Través del Tiempo, una calculadora con música en sus botones (según mi abuela "es lo último que hay") y el recordado libro La Carrera Interminable, de la colección Elige Tu Propia Aventura, que hizo nacer mi pasión por el rally. Todo eso se sumó a esas noches templadas en el fondo de mi casa de Ramón Castro llena de invitados, emociones y alegría pura.

sábado, 19 de diciembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: FORMULA 1

     

El ‘’boom’’ de la época. Con sólo decir que era más popular que el mismísimo fútbol. Cada domingo temprano a la mañana, los argentinos estábamos frente a ATC para ver al Lole Reutemann con su Williams blanco y verde número 5 corriendo con los monstruos de entonces, que empezamos a conocer al dedillo: Villeneuve, Prost, Laffitte, Piquet, Pironi, Arnoux y Alan Jones, a quien yo le tenía bronca porque a pesar de ser coequiper de Reutemann competía con él.

Además me sabía perfectamente los auspiciantes, colores, diseños y números de cada auto y mucho más. Y la euforia por la F-1 y las victorias del Lole llegaban a la gente no sólo por televisión: los autitos playeros y, sobre todo, los útiles escolares como los míos también estaban de moda. Encima después leía la Corsa y allí podía revivir todo. Una época que hizo época.

viernes, 4 de diciembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: BAILE A LO TRAVOLTA

 

Aquella mañana en el anfiteatro del Colegio La Salle de Florida fue el recuerdo por excelencia del 78. Para el acto de fin de año, mis maestras jardineras del Mafalda Analía y Susana me designaron para bailar como el gran John travolta, el inefable protagonista de ‘’Fiebre de sábado por la noche’’ y con la gloriosa música de los Bee Gees, con temas como ‘’Staying alive’’ o ‘’Night fever’’ de fondo. Con ellas ensayé mil y una mañanas en el jardín, me ponía fastidioso por tener que hacerlo cada dos minutos, lo mismo que por ponerme las botitas que no me calzaban bien. En ese momento ni sabía para qué ni por qué lo hacía, pero escuchaba a cada rato un poco de Bee Gees en mis oídos.

 

Llegó por fin el soleado domingo 3 de diciembre. Todo empezó en el vestuario con Analía y Susana, que me ayudaron a cambiarme. Recuerdo que estaba en calzoncillo amarillo cuando mis maestras jardineras me pusieron el trajecito blanco que, lleno de lentejuelas, me pinchaba el cuerpo. Luego me ayudaron a subir al escenario de madera en un salón amplio, iluminado con luces de todo tipo y las famosas bolas de espejos, entonces de moda.

 

Y en ese majestuoso marco bailé y canté como el gran actor, una actuación memorable para los que la vieron, que fueron muchos y que estaban sentados cerca del escenario; desde ya, mi familia (con mis abuelos incluidos) en primera fila. Esa gran mañana fue el corolario de un año grandioso y que perduró a través de los años.

 

viernes, 27 de noviembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: ATLAS GEOGRAFICO UNIVERSAL COLOR

 

El inmenso libro que en el invierno del 85 se constituyó en un gran recuerdo desde que lo compré en una promoción que impulsaba el San Antonio. Me lo leí entero ese año y me deleité con el riquísimo contenido: el índice, la descripción detallada de cada país, cuadros informativos, banderas, mapas e increíbles fotos, aparte de apéndices como la Argentina, la estadística económica mundial y astronomía. Pero lo que me llamaba la atención eran las capitales de cada país y las naciones nuevas como Vanuatu. Y fue muy útil para el colegio, sobre todo en el trabajo grupal sobre Francia. El AGUC (como lo bauticé) fue un sinónimo de aquel dorado 85.

viernes, 20 de noviembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: LA IGLESIA DEL SAN ANTONIO

 

El lugar símbolo de mis comienzos católicos en mi gloriosa primaria, una modesta pero hermosa iglesia ubicada al lado del patio de Gimnasia, cuya pared exterior era blanca y tenía una pequeña puerta y un escaloncito como entrada. Y su interior me recuerda tantas y tantas tardecitas de catequesis, pasaba tanto tiempo allí como en el aula; incluso en los primeros años la usamos para música o gimnasia, quizá por falta de lugar. Tenía piso de cerámica beige, columnas gruesas y los acostumbrados largos bancos marrones de madera. Pero el rasgo inconfundible eran sus ventanas con vidrios divididos en cuadritos de colores (rojos, verdes y azules entre otros).

 

Del otro lado había ventanas corredizas con alambrado cuadrado que se veían desde afuera. El altar daba espaldas a una enorme pared marrón, sobre la que se veía la cruz del mismo color. Y el sagrario era de oro, todo un lujo. Unas luces en el techo en la parte del altar y bellos canteritos de ladrillo blanco completaban la preciosa escenografía de la iglesia.

 

viernes, 13 de noviembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: CASA DE MI MADRINA EN CARAPACHAY

 

La primera casa de mi madrina Marta fue uno de los referentes de mis primeros años, junto con el jardín. Justamente estaba a un par de cuadras de allí, recuerdo su parecita con barandas y su puertita de entrada, luego un living comedor muy grande y el patio, con una hamaca o algún divertimento por el estilo. Ahí fui muchas veces, como una mañana, una noche con un pulover en la cintura y otro día donde las perras Bambi y Quiria se peleaban en el patio.

 

viernes, 6 de noviembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: EXCURSION AL CONGRESO

 

La mejor salida que hice con mi Colegio San Antonio, esa lluviosa tarde del 85. No sólo por lo trascendente, sino por la increíble belleza de un lujoso salón con espectaculares detalles arquitectónicos como esas ventanas vidriadas formando círculo en el techo o los modernos escritorios donde me senté. A la vuelta, mientras miraba la llovizna por las ventanillas del micro, hacíamos lío con bromas o golpeando los asientos al cantar, por lo que la maestra nos tuvo que retar: ‘’No golpeen más que las manos’’, dijo. Mi compañero Roberto Y Ziolo y un par más cantaron “Para el pueblo lo que es del pueblo” en esa divertida vuelta.

 

viernes, 30 de octubre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: FELIZ CON BOCA DE MARADONA

 

Mi mejor recuerdo futbolístico de esa gran era, en 1981. El Boca de Diego Maradona, dirigido por Silvio Marzolini, obtenía el torneo Metropolitano empatando en la última fecha 1-1 con Racing (gol de Diego de penal). Yo seguí todos los partidos cada domingo por radio, y aún me queda en la memoria cuando íbamos en auto por Palermo y escuchamos el gol de Talleres, que le igualaba a Ferro 1-1 y lo ayudaba al equipo de la Ribera a salir campeón. Después, mi abuela -siempre disconforme- comentó sobre el empate de Boca: ‘’1 a 1, qué vergüenza’’. Ese 1-1 permitió la alegría azul y oro.

viernes, 23 de octubre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: CRONICAS FUTBOLERAS EN LA RAZON

 

A partir de 1980, con siete añitos, el recordado diario nocturno marcó mis mañanas del año. Apenas me despertaba, me lo encontraba en mi cama y me deleitaba con las crónicas de la fecha de fútbol; era la época de Gatti, Benítez, Brindisi, Kempes, Fillol, Brailovsky, Calderón, Insúa, Barisio, Rocchia, Cornaglia, Lanao y Maradona aún en Argentinos. Era, también, la época de aquel Nacional de la AFA con Loma Negra de Olavarría o Guaraní Antonio Franco. Además me atrapaban los ‘’Dialoguitos en el asfalto’’ y otras noticias de fútbol y otros deportes. Otro clásico de casi un lustro.

viernes, 16 de octubre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: SEMANARIO INSOLITO

 

El primer éxito de un ídolo para mí como el gran Raúl Portal, que impuso su particular estilo con sus disparatados dichos (¿se acuerdan de ‘’el caco’’?). También estaban Becerra, Castelo y Virginia Hanglin. Uno de los mejores cómicos de ese momento, que siempre veía las noches de semana en ATC.

jueves, 15 de octubre de 2020

EL PORTAL DE LA RISA

https://www.youtube.com/watch?v=g-O8wrp12HA        


Portal en Semanario Insólito

 

Qué malo, cruel es el paso del tiempo. Especialmente este siglo XXI que  se nos va llevando tantas almas famosas que nos hicieron felices. Así como Juan Carlos Mesa  o Juan Carlos Calabró hace años, este miércoles se nos fue el divino Raúl Portal. Un tipo único para su tiempo, que supo combinar actualidad, periodismo y humor con un estilo absolutamente propio. Que marcó grandemente la tele de nuestra infancia y adolescencia, solo o en banda,  con éxitos imborrables: el disparatadísimo Semanario Insólito, La Hora de los Juegos,, Notidormi o el indesperdiciable PNP y su desopilante recopilación de errores televisivos. Para mi ver de televidente, no soy crítico de TV, me gustó más como cómico que en su posterior faceta solidaria, igualmente alabable, con los animales y El Portal de las Mascotas. Pero el genial Raúl de la tupida barba y voz típica, un ídolo eterno más de nuestra vida, será siempre el portal de la risa.

viernes, 9 de octubre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: HANSEL Y GRETEL

De los libros de cuentos que leía en mis primeros años, el más recordado por mí. Un precioso libro de tapa dura, con páginas plastificadas, imágenes en 3 dimensiones y bellamente ilustrado, que narraba la aventura de los hermanitos que huyeron al bosque porque su madrastra no los quería, se perdieron y luego encontraron una casa de chocolate y confites, donde una bruja los quiso comer, pero ellos terminaron encerrándola en el horno y pudieron escapar con muchas monedas de oro y volver con su padre, un leñador. Me deleitaba ver la famosa casita confitada, yo también me la quería comer... El cuento pertenecía a la Colección Muñequitos, que además tenía títulos como El Patito Feo, Pinocho, Caperucita Roja o Blancanieves y Los 7 Enanitos. 

viernes, 2 de octubre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: TOPE & QUARTET

 

Uno de los juegos más recordados de mis primeros 80. El fabuloso mazo de naipes con imágenes de autos, motos, barcos o aviones marcó esos días, por ejemplo, de 1981. Me viene a la mente mañanas en el fondo jugando con mis hermanos, que eran fanáticos, más si era de motos. Y ni hablar de las lindísimas imágenes: una espectacular Maserati GTX, una Ferrari roja en una ruta, una moto Triumph y otro auto en un lavadero con tubos fluorescentes un día de lluvia.

viernes, 25 de septiembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: PIZZERIA LAS MALVINAS

Otro histórico de Carapachay y de mis épocas doradas, especialmente de 1983. En la esquina de Puerto Argentino, frente a la barrera, la pequeña y linda pizzería se destacaba por su pared de mármol naranja y sus amplios vidrios, que dejaban ver las luces fluorescentes que la iluminaban. Y también por la espectacular pizza que comía los viernes en casa, con una Gini de 1 ¼ litro y Titanes en el Ring. Una noche de ese 83 mi papá me trajo de aquí una Coca chica para que tomara en el auto.

viernes, 18 de septiembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: TIO OMAR CORREDOR DE MOTOS

Un recuerdo que me alegra y me emociona del inolvidable tío, que muchos domingos a la tarde íbamos a ver allá al Autódromo correr y casi siempre ganar con la Kawasaki negra número 4 las carreras del campeonato nacional; cuando ganaba era por amplio margen. Ahí anduve en los boxes, tomando alguna Coca Cola y viendo a los distintos equipos. Y a él, que a veces, y vestido de piloto con el buzo lleno de auspiciantes, charlaba con nosotros allí antes de la carrera. Después lo revivía en la Corsa en la casa de la lela; me acuerdo de Salatino, García y otros ases del motociclismo, una pasión histórica en mi familia gracias al tío y sus éxitos. Todos los recuerdos que forman un único pero imborrable y emotivo para guardar para siempre.

viernes, 11 de septiembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: MIS MAESTRAS

Hoy es otro Día del Maestro, el que vivo con mucha intensidad año a año. Porque decir maestro, maestra en mi vida, me conduce indefectiblemente a la infancia. Y se impone que en esta bella sección de Así Es La Vida ellas tengan su lugarcito, después de todo lo que se brindaron por mí y mis compañeros.

Entonces recuerdo primeramente a Analía y Susana del jardín Mafalda de mi Carapachay, especialmente la primera con quien me hablaba más. Y luego cada una de las que marcaron mi tiempo dorado del Colegio San Antonio. Diana de primer grado, a quien volvía loca con mi conducta pero que me hizo dar los primeros pasitos en todo. La morocha de voz potente Graciela, en segundo, muy parecida a Diana. El dúo de tercero, la rubia y dulce Matilde que dejó su lugar a la buenísima Adriana. En cuarto apareció Maruca, con sus gritos no muy correctos y por otro lado, su cariño con nosotros, además de inculcarnos fuertemente la fe. La española Rocío, un personaje de quinto. Y para sexto y séptimo, a Maruca se unió la más divertida:Patricia, con su vozarrón, su permanente humor cargado de ironías y, claro, sus retos, pero con su juvenil forma de ser cercana a nosotros. Y las de otras materias aparte: Mabel de Gimnasia y su hándbol, la inefable Hilda de Música y la flauta dulce que yo no quería, las técnicas de Dibujo de la cordial Silvia, alguna suplente como aquella Lucía que una tarde nos dijo "hasta siempre tercer grado". Y también Liliana y su fuerte carácter, aunque sólo estaba de observadora pero bien que sancionaba. Entre la educación temática, la humana y el amor, todas se ganaron un sitio en mi alma.

viernes, 4 de septiembre de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: CURIOSO CON JUGO TANG

En 1982 salió el jugo Tang, entonces sólo de naranja y en sobre, que como su famoso jingle tenía "sabor a naranja recién exprimida", era riquísimo. Y yo lo disfrutaba en cada comida. Al año siguiente, en 1983, el de mis 10, vino en frasco de vidrio. Y como me gustaba curiosear todo, como siempre en mi vida, encontré las indicaciones de cómo prepararlo, y me parecieron tan interesantes que las leí y releí detenidamente. Incluso, como hacía con otras cosas, me importaba sus ingredientes y cantidades, y hasta reparé en la empresa fabricante, la legendaria Kraft Food. Esas eran mis alegrías de niño, sanas como la Tang.

viernes, 28 de agosto de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: DEPORTE EN LIVING

Alrededor de mis ocho o nueve años, jugaba al fútbol con mi pelota por toda la casa, pero en especial en el living principal de casa, un lugar muy característico de esos tiempos. A cualquier hora, especialmente cuando volvía del colegio y de noche, me ponía a patear corriendo el riesgo de romper algo o voltear alguno de los mil adornos del living. A veces también jugaba al básquet con la misma pelota tirando contra la pared de los almohadones. Y en alguna ocasión al vóley, haciendo rebotar la pelota contra el techo.

viernes, 21 de agosto de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: ESTACION DE SERVICIO

Uno de los más lindos juguetes de mi infancia, allá por 1979. Me la regaló mi tío y era enorme, con un techo rojo que decía YPF y dos pisos: uno para guardar los autitos que venían en ella y el otro con compartimentos de lavado, engrase e increíbles surtidores hasta con su manguerita sobre el piso amarillo que decía ‘’estacionamiento’’. Y al costado, una rampa blanca que permitía a los auttitos subir y bajar por allí. Con ella jugaba sobre la cama (en donde casi siempre lo hacía con todos mis juguetes), como lo hice una mañana de semana.

viernes, 14 de agosto de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: MI PRIMER DIA DEL NIÑO

Este domingo será un nuevo Día del Niño. El día justo para que antes, en esta maravillosa sección, cuente cómo fue mi primer día que registro. Aquel lluvioso domingo 2 de agosto, esa gris mañana recibí estos obsequios que luego marcaron esos días: el divertido dominó Fénix con sus piezas y su caja de madera lustrada y la nueva pelota de cuero blanca y celeste, con la que jugué el resto del año en el pasto de casa.