lunes, 8 de junio de 2020

RECORDANDO ITALIA 90: LA DERROTA INAUGURAL



Video: el gol de Biyik ese viernes 8 de junio que nos dejó perplejos

Ya pasaron 30 años y no fue un título, fue un segundo puesto. Pero ni el paso del tiempo ni el marcador final pueden achicar un recuerdo tan emotivo como imborrable. En este junio, el mes de los Mundiales, repasaré mis vivencias de la Copa del Mundo de Italia 90 y, sobre todo, de la novelesca campaña de la Argentina, que la condujo a la final con Alemania. Pero que empezó de la manera menos pensada.

En 1990 volví a vivir intensamente el Mundial, ya había vuelto mi pasión por el fútbol. Tan intenso fue que creé unos días antes el fascículo Italia 90, donde escribía diariamente comentarios y síntesis de cada jornada, despuntando mi vocación de periodista. Con los días el fascículo se convirtió en el recuerdo por excelencia de la Copa, igual que el Clarín y ATC, único canal oficial donde seguía los partidos a las 12 y 16 cada día y el resumen de la noche que presentaba GoldStar. Hablando de propagandas, recuerdo las de Minoxile, una muy bonita de Fiat Regatta con música de ópera, la de ginebra Bols y la mesa redonda en ATC previa a cada transmisión, donde una linda chica rubia servía malta Bessone a los periodistas.

Era mi plena adolescencia a los 17 años; tenía problemas anímicos y recién salía de una fuerte gripe. Estaba en 5º año del Güemes (última edición cortada por tareas del colegio) intentando aprobar el primer cuatrimestre y soportar ese desagradable ambiente, y encima iba a la psicóloga Edith. Pero también vivía muy buenas: había vuelto a poner mi escritorio en mi habitación. Y la Z 95 era moda; allí se escuchaba el glorioso ‘’Un verano italiano’’ de Edoardo Bennato y Gianna Nannini, el más hermoso de los Mundiales, que llegó al puesto 34 de los 40 de la radio y que junto a ‘’Debe haber sido amor’’ de Roxette fue referente de esos lindos y fríos días.

El soleado viernes 8 de junio, el día de la inauguración con la Selección ante Camerún, el gobierno de Carlos Menem había declarado asueto nacional. Por eso yo estaba en casa, disfrutando de la hermosa ceremonia. Un rato antes de las 13, hora del encuentro, vinieron mi hermano Leo y su entonces novia Mariana a almorzar. Leo comenzó a comer el guiso de arroz que LA mucama Ramona había dejado y al no gustarle, cocinó un pedazo de vacío que tardó en hacerse, pero con el que almorzamos.

Más tarde y en pleno partido, llegaron mis padres del local de ropa de Avenida Santa Fe. Y todos sufrimos la derrota de Argentina. El duro 0-1 motivó mucha bronca de la gente (‘’Batista no puede jugar más’’, dijo uno) y en la Z, el recordado Scanner comentó: ‘’Muy linda la ceremonia; ahora, cuando vi lo que vino después... Pero bueno, un tropezón no es caída’’. Días después en clase del Güemes nos pusimos a discutir con la profesora Dimitri; Mi compañera Susana Varone no entendía cómo Camerún nos había ganado.


viernes, 5 de junio de 2020

HISTORIAS DE INFANCIA: CANTAR EN LA DUCHA

Fue un lindo clásico de mis añitos. De tanto en tanto al principio y luego, a medida que la música la iba conociendo y gustando, más aún. En esas duchas en el baño de la planta de abajo de casa, cantaba los temas de moda de entonces. Por ejemplo, en 1983 Gloria de Umberto Tozzi, en 1984 Union of the Snake de Duran Duran o Forever Young de Alphaville y en 1985 el recordado grupo juvenil Tremendo. Después seguí un par de años en la adolescencia y nada más. Pero cantar en la ducha fue bien una alegría de infancia.

MUSICA: LOS "ONE HIT WONDER"



Video de Tarzan Boy

Es otra curiosidad, seguramente la mayor, de la música, al menos la moderna. A lo largo de la historia, existieron muchísimos intérpretes, sean bandas o solistas de la más variada clase, que pegaron un éxito o dos, como mucho un álbum, y luego desaparecieron, sea porque en la mayoría era un proyecto comercial para el momento, por diferencias o razones personales. Así, muchas canciones sin embargo quedaron en la eternidad, más que sus autores o ejecutantes, de los que mayormente no se supo más nada o fallecieron. A esos casos se los denomina One Hit Wonder, que en inglés significa Maravilla de un Solo Hit o Éxito. Ejemplos: Tarzan Boy de Baltimora, cantante irlandés fallecido; Living In A box del grupo homónimo, sacó un disco y se separó; What's Up de 4 Non Blondes que ya comentamos, el bailadísimo Funky Town de Lipps INC y mil que se quedaron ahí pero permanecen en nuestra memoria. Recuerdo que en 2008, la excelente FM Aspen hizo un especial de varias horas juntando varios One Hit Wonder, y explicó su significado y todo. Asimismo, saliendo de la moderna, podemos mencionar a Gilda, la cumbiera luego santificada que perdió la vida en un accidente tras su único disco. Es así, el artista pasa, la música queda. Aunque sea una sola canción.

CON UNOS MINUTOS ALCANZA

Como tantas veces escribí aquí, el viernes es ese momento, al menos tras el trabajo, para relajarse y volar por la vida, sin tiempo ni espacio. Llega el final de la semana hábil y todos queremos desenchufarnos de la actualidad, la propia y la de los diarios. Así nos reunimos en un lugar y café de por medio nos ponemos a charlar de bueyes perdidos, o lo hacemos por teléfono o los medios ultraavanzados de ahora. Pero a veces el tiempo no nos da para tanta charla, sea por nuestras cuestiones familiares o quehaceres de cualqier tipo. Entonces nos quedamos con las ganas de más, me suele pasar, y lo que sigue a eso no nos llega, parecemos frenados en el tiempo, en un punto muerto. Pero hay una buena noticia para nosotros los charlatanes: lo importante no es el tiempo cronométrico, es el afecto, es la persona, es la calidad del momento. Si se puede que dure un día entero, y si no, unos minutos con alguien que vale y nos hace felices sirven mucho más que dos horas con uno que después se evapora, o esos que se consideran nuestros amigos porque sí. Calidad, no cantidad, es la clave de un buen momento. Disfrutemos, aunque sea un rato.

miércoles, 3 de junio de 2020

!SALIÓ EL LIBRO DEL FUTBOL AFRICANO!

Es una nueva alegría para mi ya larga y rica vida de periodista. A mi trabajo en radio entre 1995 y 2014, a mi tarea en la gráfica desde 2013, a mi participación en España, se suma un nuevo hito. Este lunes salió a la venta el primer libro de fútbol africano, por quién sino otro que mi amigo Francisco "Pancho" Jáuregui, quien me avrió las puertas en 2013 de su excelente revista Sporting Africa. Y como entonces tuvo la generosidad de aceptarme cuando nadie lo hacía, como me llevó a España, ahora me generó esta alegría de mi colaboración en el mismo, donde escribo sobre Africa en los Mundiales. El ejemplar se llama exactamente Fútbol Africano: Crónicas, Historias e Investigación, y allí Pancho vuelca su experiencia (como él mismo señala) del tema y su curiosidad por un continente siempre menospreciado. El mismo abarca desde el nacimiento del deporte allí, problemas con edades y nacionalidades, fútbol femenino y anécdotas de más de 20 países, con prólogos de mis conocidos colegas Ariel Scher y Andrés Del Burgo. Se puede comprar a través del sitio web de la editorial, Libro Fútbol, y es recomendable para los futboleros ahora que el balompié africano está más en vidriera con tantos talentos en Europa. Además, para mi vida un logro, desde esos días de 1988 que soñaba despierto con el fútbol africano, escribiendo, charlando con los chicos de la secundaria y mi familia y grabando o prestando atención a todo lo relacionado a él. Ahora es más realidad. Grande, importante, como Africa.

martes, 2 de junio de 2020

FUERTE CRUCE DE OYENTES EN RADIO

Si el frío y el coronavirus atacan, trataremos de calentar vuestras almas con cosas como ésta. Por fines de 1994, la radio Top FM (luego Top 40) era furor y recibía muchos llamados de oyentes, algunos de los cuales salían al aire. En un programa de madrugada llamado justamente Insomnio, dos de ellos, parece antigua pareja, se trenzaron en el mismo aire por teléfono. El conductor los sacó y el chico y la chica en cuestión se dieron cuenta de quién era el otro y se dijeron cosas no muy malas, pero sí desubicadas. Fue una cosa así:

El chico: Ah, pero pará, vos sos Fulana (no recuerdo el nombre).
La Chica: Sí, y vos sos Fulano…
-Ah, pero vos sos tal cosa (no recuerdo exacto qué).
-Sí, y vos sos tal otra, respondió ella enojada.
Él: Callate, andá a… (no recuerdo qué).
Ella: Andá, rubio arrepentido…
Y al conductor: -Esto es una broma tuya.
El conductor: No, yo qué tengo que ver, yo no…
Ella interrumpiendo: Sí, sí, esto es una joda…
El conductor siguió hablando y el chico espetó: "Yo quiero una mujer, no un secador Koh-I-Noor (debe ser por lo gorda).
Ella sin dudar: Andá, nene, vos sos un tarado…
El conductor: Uh, bueno, se pudrió todo, chau chicos…

Tremendo. La ordinariez tanto en la gente como en los medios ya venía de antes. Eso sí que da calorcito, lástima que no de hogar.


lunes, 1 de junio de 2020

MAS QUE NUNCA, HAY QUE PASAR EL INVIERNO

Llegó junio, mes del comienzo del invierno, aunque éste oficialmente arranque el 21. Pero con este gran frío que se abatió sobre la Argentina desde ayer, ya lo empezamos a sentir y, quienes lo rechazamos, sufrir. Es que no sólo las bajas temperaturas molestan, tensan, condicionan el cuerpo y el alma, las noches tempranas y largas, la poca potencia solar. Encima, este 2020 será especial y más complicado que años anteriores gracias al innombrable virus. Entonces, hay que cuidarse más, por éste y por los que circulan sin permisos del Gobierno cada invierno. Y por el pico de la pandemia que se dice será este mes. Entre una cosa, la otra y la otra, queda perfecta la frase del recordado político Alvaro Alsogaray, fundador de la UCD. Más que nunca, chicos, hay que pasar el invierno. Y con el virus.