Bienvenidos a Así Es La Vida, un blog de todo un poco, una charla con un amigo, sin tiempo ni espacio, sin intereses, sin estructuras. El caminar de un ciudadano por la vida. Dedicado a mi madre Anita.
jueves, 31 de diciembre de 2020
EL NOTICION DEL AÑO: TERMINA 2020
jueves, 24 de diciembre de 2020
¿QUÉ FESTEJAMOS TANTO EN NAVIDAD?
martes, 22 de diciembre de 2020
A ESTA TIERRA VINIMOS A ERRAR
lunes, 23 de noviembre de 2020
!POR FIN! MI PRIMER VIDA SOCIAL TRAS MARZO
En este tiempo de coronavirus,
cada día que salimos de él es casi unas efemérides, aunque sean de nuestra
vida. Este lunes mis compañeros del Güemes, mi seccundaria, con quienes voy a
cumplir 30 años de egresado, me invitaron a salir a caminar. Eleonora y Leo,
obviemos los apellidos, me pasaron a buscar y fuimos a tomar helado en un lugar
al aire libre, como se permite ahora. Fue entonces mi primera reunión, salida,
vida social en ocho meses, porque hasta ahora sólo había ido de casa a compras
y de vuelta. La última vez que la pasé lindo de excursión fue el 13 de marzo
con Margarita y Roque, mis conocidos de Radio Capa donde canto cada tanto, con
quienes merendé y cené, ese 13 donde existía aquella ya olvidada cuarentena optativa.
Este lunes rompí el hielo de la falta de salir, que tan accostumbrado estaba en
estos años. Ahora veremos si se extiende más, con reuniones y sobre todo
esperando ansioso volver a tocar. Y sí, había que salir del agujero interior.
lunes, 16 de noviembre de 2020
EXCEPCIONAL PROMO DE QUILMES Y SUS 130 AÑOS
A través de los años hemos
disfrutado y seguimos haciéndolo a la Cerveza Quilmes como la mejor realizadora
de publicidad, con varias inolvidables, espectaculares, risueñas, supercreativas.
Ahora, al cumplir sus 130 años de vida, nos deleita de nuevo con un genial spot
a cargo del más aún genial Lalo Mir, uno de los hacedores del gran programa de
los 80 Radio Bangkok entre otros éxitos. El famoso y excelso locutor casi se
queda sin aliento al contar las mil gracias a distintas cosas que pasaron y
pasan por la historia de la legendaria bebida. Las pizzerías, las picadas, las
radios, la ciudad de Quilmes, el rock, incluso se nombra y alaba a él mismo
("1000 gracias para mí, Mir"). Y concluye con un emotivo resultado:
"Un millón de gracias por estos 130 años". Todo matizado, como siempre,
por música que recuerda, en este caso la instrumental de Feliz Domingo para la
Juventud, otro ícono de la TV 80. La verdad, gracias tenemos que decir
nosotros. A Lalo, capo de la radio, aparte tipo culto como pocos en los
paupérrimos medios. Y a Quilmes, que otra vez nos sorprende gratamente con su
liderazgo publicitario.
jueves, 12 de noviembre de 2020
HIMNO A LA MEDIANOCHE
No sé cuántos se quedan
despiertos con la radio o la TV a la medianoche, es decir a la 0 hora del nuevo
día. Si lo hacen, seguramente sabrán que en ese momento se pasa el Himno
Nacional Argentino, dando con él el comienzo al nuevo día de emisión. Eso
sucedía, recuerdo, en los años 80 un día patrio, un 25 de mayo, 9 de julio.
Pero ahora es todas las medianoches.
Ahora pero desde hace casi
20 años. Porque por ley 25.636 el Gobierno estableció desde el 1 de agosto de
2002 el himno como apertura obligatoria de cada jornada para las emisoras que
cuenten con licencia, no así las comunitarias. Y claro, la obligación, guste o
no, es obligación. Y como la obligación no es el fuerte argentino, cuentan que
la mayoría no lo transmite o lo hace en forma corta. Yo lo he comprobado con
algunas que prefiero no mencionar. Lo pasan resumido, o sólo la introducción,
hasta una pasó el "oh oh oh" de la versión futbolera. Los entiendo un
poco, debe ser molesto y contraproducente cortar con el largo himno la dinámica
de la radio o canal en cuestión. No hace falta pasar el tema patrio para ser
mejor argentino, para que se sepa que se transmite desde acá, para dar más
nacionalismo innecesario. Pero si la ley lo pide…
viernes, 6 de noviembre de 2020
!FIN DE LA CUARENTENA! PERO NO DEL VIRUS...
Hoy es un día de lo
más histórico en la Argentina. No hubo cambio de presidente, no falleció nadie
legendario, no ganamos un Mundial. Simple y grande, se terminó (si es que aún
existía) la cuarentena por coronavirus tras 233 días. Según el mandatario
Alberto Fernández y sus principales gobernadores, se dispuso pasar del ASCO
(aislamiento, realmente un asco) al DISCO (distanciamiento, realmente un disco
de buena música). De no poder salir ni a la puerta salvo con permiso de papel a
hacerlo con restricciones, como el transporte público. Pero vuelven las
reuniones (pocas personas), los espectáculos al aire libre, las clases (por
Dios, las clases de los pibes) y otras actividades aún cortadas por la maldita
pandemia. Y si bien no soy de ningún Gobierno, coincido con Alberto. No sólo el
virus no se fue, sino que debemos estar muy precavidos. Sigamos con el barbijo,
el alcohol, obvio el distanciamiento, obvio los cuidados que tanto sabemos y
hacemos pero algunos todavía no. La cuarentena terminó, se da lo que anticipamos
entradas atrás, reabrir todo con cuidado pero reabrir. Ahora más que nunca, la
responsabilidad es muy nuestra. Porque, aparte, aún no hay vacuna por más que se
diga. Así que a estar fuertes, sin cuarentena pero sin virus.
martes, 27 de octubre de 2020
LA COSTUMBRE DE HABLAR EN INGLES EN ARGENTINA
No creo que sea por la
globalización, ese fenómeno que todo lo iguala y permite en este nuevo siglo.
Es más bien una de esas tantas moditas de la mal llamada modernidad. El tema es
que de tanto aprender inglés y escuchar estos desastrosos medios de
incomunicación los argentinos nos hemos malacostumbrado a hablar más de un
ccuarto de nuestro lenguaje en ese idioma. Ejemplos sobran: out, delivery,
take away, touch and go, la sigla CEO (Chief Executive Officer) por gerente, el
famoso manager, music, cheese cake. O los actuales influencer, game changer, founder y todo lo que termina
en er. Mismo los futboleros con la Champions League, en vez de Liga de
Campeones. Molesto, estúpidamente intelectual, intelectualmente estúpido,
innecesario. Tampoco quiero ir al extremo de hablar como gaucho, bueno, al
menos me acerco más a nuestro origen. Porque según aprendí estos 47 años, acá
se habla español. Capaz que me desinformé y no me enteré que cambió el idioma
por decisión del Gobierno y ahora el oficial es el inglés. Very fool. Uh,
perdón, muy tonto.
domingo, 25 de octubre de 2020
CUANDO MAURO VIALE NO RELATÓ MÁS
Por más de una década, Mauricio Goldfarb, más conocido como Mauro Viale, fue la voz icónica de las transmisiones televisivas de fútbol en la Argentina. Su excelente estilo, su nivel periodístico y cultural lo destacaron como el relator de la pantalla y uno de los narradores típicos del país, que hinchas y colegas sabían disfrutar. Hasta que un buen día decidió no hacerlo más y pasó a su actual trabajo general, incluso con tintes sensacionalistas.
El Mauro de la pelota redonda nació en 1947 en
Buenos Aires y en los años 70 comenzó su carrera como reportero y ocasional
comentarista de los encuentros de la Primera División. En 1974 fue uno de los enviados
especiales al Mundial de Alemania por el viejo canal 11, hoy Telefé. Fue en
mayo de 1977 cuando empezó su tarea más recordada en el deporte rey, al relatar
para Canal 7, que con la proximidad de la Copa del Mundo de Argentina se
convirtió en Argentina Televisora Color (ATC). Así impuso su jerarquía a la
narración, nombrando sólo al protagonista, sin descripciones inútiles ni la
alienación que envuelve a varios de la actualidad. De esa forma y con Enrique
Macaya Márquez, otra potencia periodística a su lado, hizo el deleite de todos
no sólo con el campeonato doméstico sino con la Selección, a la que acompañó
para los Mundiales de 1978, 1982 y 1986, éste donde tuvo el privilegio de contar
al país las hazañas de Diego Maradona y el título en México.
Ya para entonces, Viale era también la voz del
recién creado ciclo Fútbol de Primera, que desde el 4 de agosto de 1985 lo
tenía como descriptor del partido principal. El legendario programa que terminó
en 2009 era obra, como decía su clip de apertura, del empresario paraguayo
Carlos Avila, fundador un año antes de la productora Torneos y Competencias,
encargada de la realización de la emisión que los domingos atrapaba a todo
futbolero con la cena.
Así Mauro trabajó con los títulos de River de
Veira, Central y Newell's, el Independiente de Bochini, las caóticas Liguillas
Prelibertadores y más. Hasta que en el invierno de 1989, Fútbol de Primera fue
traspasado de ATC a Canal 9, que contaba con otro ícono, Marcelo Araujo, como voz
destacada. Entre el cambio y su fidelidad a la emisora de su vida, Viale
decidió imprevistamente dejar el relato. Además, en una entrevista que dio años
atrás en el diario La Nación, confesó que un día le dijo a Avila: "Negro,
no quiero relatar más, me aburrií".
Su último encuentro, según averiguaciones de
Tribunero.com, fue el 27 de julio de 1989, nada menos que un River-Boca pero
por la loquísima Liguilla Clasificación para la Copa Libertadores 1990. El
famoso minitorneo fue dividido entonces en rueda de ganadores y perdedores, en ésta
los colosos habían llegado a la final y tras dos empates sin goles, ese 27
River ganó 2 a 1 y siguió en carrera, para meses después batir a San Lorenzo de
Almagro y lograr el segundo lugar copero aparte del campeón liguero Independiente.
Luego Viale incursionó en noticieros Y, SOBRE TODO,
programas de alto voltaje mediático en la década del 90, y hoy sigue en ese
rubro pero con un estilo más moderado. Pero quienes amamos el fútbol lo tenemos
como un grande más de nuestra rica historia con una pelota.
Así relataba Mauro aquel River-Boca del 89:
jueves, 22 de octubre de 2020
"UH, HOLA, TANTO TIEMPO"
El título no es un simple
saludo. Es un saludo repetido. Repetidamente insoportable en ciertos casos, una
del frasero mentiroso. Sí, puede ser que en otros casos sea sincero, que vos
sientas que extrañás a alguien y se lo demuestres y quedes bien. Pero
generalmente, y como esta insociedad hace de la amistad una religión necia, el
saludo es absolutamente vacío. Cómo me vas a decir "uh tanto tiempo"
si en todo este tiempo ni llamaste, ni pensaste en mí, ni preguntaste por mí o los
míos. No, aprovechás la cenita de cumpleaños o el asadito de 3482 personas para
mandar el cliché. Ya sé, no puedo cambiar a la gente. Al menos puedo ayudar, como
hacemos siempre aquí, a pensar un poquitito con esa mente las cosas que
decimos, o que decimos que decimos.
LAVAR Y DESINFECTAR NO ES POR EL COVID
Con el tiempo del coronavirus
que no termina nunca, hay que tomar medidas de prevención profundas para
evitarlo. Una de ellas es el lavado y desinfección, de manos primero que nada,
de superficies, de alimentos y bolsas de compras ni hablar. Pero algunos ahora
están descubriendo la pólvora. Resulta que el lavar y desinfectar es por el coronavirus.
Nada que ver. El lavado y desinfección, la higiene y la limpieza, son palabras más
que milenarias. Toda la vida, desde niños, hemos aprendido a ser limpios en
todo, desde el bañarse, las manos antes de comer, los lugares donde andamos,
hasta (perdón) los fluidos de nuestro cuerpo. Pasa que en este mundo XXI donde
todo es grandilocuente esto es una supernoticia para varios, cuando en realidad
es de tiempos inmemoriales. En verdad es más que una buena costumbre, el aseo
personal y general es un instinto. Que ahora algunos lo conozcan por un aviso,
es otra cosa.
miércoles, 21 de octubre de 2020
LOS CELOS, LETALES CONTRA EL AMOR
Algunos dicen que es
inseguridad. Otros, que son lógicos por un probable desamor. Otros, que es
desconfianza y falta de fortaleza en la pareja. Si se duda del otro puede ser
sinónimo de todo eso. Como sea, los celos sentimentales, y también los de todo
tipo (familiares, laborales) son letales para una relación. Dividen, deterioran,
molestan, embarran algo bueno que está naciendo. Esta cuarentena, cosa que
cuesta sostener, ha propiciado cuestiones como ésta. Hasta son infantiles según
algunos, por qué dudar del otro si se confía, salvo, claro, que sea algo alevoso,
demasiado visible. Los celos son malos, no creamos que son parte de una
relación. Son más bien un arma letal contra el amor. Y celar no es cuidar al
otro, es ponerlo injustamente en incomodidad.
sábado, 17 de octubre de 2020
EL VALOR DE LO QUE QUEDA
Siempre se dice, cuando uno vive lamentando ausencias, faltas de lo que sea, que hay que ser feliz con lo que se tiene. Es totalmente aplicable a este tiempo de coronavirus, donde todos vivimos insultando al destino, al virus, al aislamiento y hasta a China. Es aplicable. Porque de una vez, tenemos que cambiar nuestro pensar, nuestra mentalidad. Por qué, me pregunto siempre, el ser humano desde su creación protesta por su debe, valora lo que no está. Es comprensible 1000 por ciento, pero no nos vamos a quedar frente al Muro de los Lamentos. Entonces, yo aprendí, démosle valor a lo que tenemos. Démosle atención a lo que poseemos, porque eso queda, se ve, lo tenemos, es realidad. Si nos quedaron 200 pesos en lugar de 500 (ojo, es un decir) quedémonos con esos 200 y saquémosle provecho. Si no tenenmos una casa, valoremos que al menos alquilamos y estamos bajo techo. Si nos falta algún sentido o parte del cuerpo, Dios no lo permita, vivamos bien con lo que nos queda. Si perdimos uno de varios seres queridos, no dejemos de costado al que está. He sabido de casos de gente enferma terminal que ha vivido lo mejor posible su cierre. Porque a todos nos tocará el cierre. La clave es ver cómo llegamos. Si lo valoramos, con lo que queda ante nuestros ojos.
domingo, 11 de octubre de 2020
DIME CON QUIEN ANDAS...
Y te diré quién eres, dice
el legendario refrán. Es importante traerlo al presente en esta insociedad en
la que vivimos. Claro, uno, ser humano, cada vez menos humano es cierto, trata
de relacionarse, interactuar socialmente, nadie vive solo, necesita de otros. Y
en esa búsqueda termina perdiendo. Pero no con algún entredicho o episodio de
falta de amor entre dos o más personas, desuniones, envidias, lo que sea. Peor
aún, se mete con gentuza. Como la gentuza tiene arte que ni Miguel Angel, te hace
creeer que está de tu lado, es divina, y después te muestra su verdadera cara,
en algunos casos bastante inconveniente. Pasa con el ambiente de la música o el
periodismo que frecuenté y frecuento, pero con todos los ambientes, si por algo
esto es una insociedad. Todos somos rebuenos, simpatiquísimos, uf, sí. Después,
cambiamos 720 grados y mostramos lo peor de nosotros. El asunto es, justamente como
el título, intentar darse cuenta de con quién uno anda. Ya sé, pido mucho, pero
bueno, el botoncito de alerta roja tiene que estar siempre activado, porque no
sabemos (aunque sepamos) a quién la vida nos pone delante. Alerta, no dar
vuelta la cara. Simplemente alerta de con quién andamos.
viernes, 9 de octubre de 2020
REABRAMOS TODO, PERO OJO
Cuando esta miseria del
coronavirus empezó y hasta hace poco,
era partidario de cuarentena fase 1, criticando esto del fútbol y mostrando
oposición a regresos de toda clase. Como el ser humano cambia de pensamiento, yo
cambié y ahora creo que esta ola de reaperturas dispuestas por el Gobierno me
parecen bien. Algo que la sociedad gritaba a lo loco, que vuelva el estudio,
que dejen abrir los negocios, todo lo que sea necesario para una buena calidad
de vida, se está haciendo y ahora sí lo acompaño. Es más, los bares y lugares cerrados
podrían en mi humilde ver reabrir también, con la necesidad de música y
reuniones que yo y otros de joven andar tenenmos. Pero no nos descuidemos,
porque el virus va para largo (rebrote en Europa, por caso) y qué decir los
contagios, crecen a ritmo europeo, hoy en día unos 14.000 de promedio por
jornada. Se puede volver con mucho cuidado, y en esto hago foco en la gente,
tan poco responsable, tan automática, que sale como si no hubiera nada. Si nos
cuidamos, si (sobre todo) cuidamos, todo puede reabrirse y vivir la famosa
normalidad aún con esta miseria. Si no, seguiremos en la misma argentina:
lamento, pero no hacemos nada.
martes, 6 de octubre de 2020
¿LLAMAMOS AL OTRO SOLO POR INTERES?
Siempre escribí que la
palabra "amigo" es muy importante, que amigo no es cualquiera
simpático y de buena conducta. En estos tiempos, con mi vida social por suerte
intensa, noto algo histórico pero cada vez más marcado: llamar a otro con un
interés, una necesidad equis, cualesquiera sea, material, anímica. Si no no
llamamos a nadie que no sea familiar o que no la esté pasando mal, si es que
recordamos que alguien querido la pasa mal. No. Todo es por interés, así sea
saludable. Pocas veces contactamos al otro para hablar "de bueyes
perdidos", como se suele decir, como aquel viejo programa de Canal 11. Es
decir, de nada especial, hablar por hablar, porque sí. Todo tiene que ser con
motivo, si no no sirve. Bueno, así es como funciona el amor en esta insociedad,
así es como vemos y sabemos lo que sabemos, que no extraña pero molesta igual.
Y no vengan con "uh el tiempo", si vos amás, si vos vivís sin
intereses, siempre tenés tiempo para el otro. Que también es un tiempo saludable
para vos.
domingo, 4 de octubre de 2020
CORONAVIRUS: HAY QUE ACOMODARSE, SE PUEDE
Esta época especialmente maldita de coronavirus en Argentina y el mundo nos tiene a maltraer según pasa la cuarentena, término al que estábamos acostumbrados sólo por gripe o maternidad. El 99 por ciento, por no decir el 100 de nosotros, estamos rebeldes, molestos, impacientes, hartos, todo. Queremos vida normal. Y como la vida normal está por ahora lejos, tenemos que vivirla de otra forma. ¿Cómo? Sin ser psicólogo ni nada, escribo lo que pienso y siento. Hay que, como tantas circunstancias de la vida (si lo sabré) acomodarse a lo que nos toca. Acomodar nuestro "lo que queríamos" a un actual "lo que se puede". Porque hay se puede, hay, como se dice ahora, plan B. Obvio que no es buena esta vida restringida, pero peor es rebelarse y hacerse mala sangre en cualquiera de sus formas, reventándose la mente y el espíritu contra la pared. Vivamos la vida, como quiera que se presente. Porque a todos, repito, nos toca acomodarnos en algún momento por algún motivo. A veces lo hacemos más rápido, otras veces tardamos, otras no queremos o podemos. Vivamos con lo que tenemos. Es así, muy pero muy cierto, hay que ser feliz con lo que se tiene. Que me parece es más que toda esta miseria.
jueves, 1 de octubre de 2020
LA NEFASTA EPOCA DE LOS REALITY
Allá lejos, comienzo de
milenio, ya lejos, en 2001 surgía el tan recordado como nefasto Gran Hermano,
el programa que mostraba un grupito de locos conviviendo en una casa, a ver
quién aguantaba más hasta el ganador, primer producto de un formato que alargó
la llamada telebasura, que ya venía en auge con Videomatch de Marcelo Tinelli
en plena decadencia. Era el arranque de los "reality show", que
debimos soportar hasta hoy, aunque ahora están menos, estos de la cocina y
demás. Pero en ese tiempo, a Gran Hermano se sumaron Expedición Robinson,
Confianza Ciega, Operación Triunfo (que consagró a Mambrú), Super M (modelos),
Pop Stars (el de las Bandana), El Bar o
Camino a la Gloria (fútbol), cerrando con Atlas La Otra Pasión, creo el más
seriecito de todos, más allá del tema fútbol. Por supuesto la mayoría sin
respeto por el televidente, vacíos, con mensajes nocivos como intercambio de
parejas, sexo en vivo y más. La vida en vivo, aseguraban sus creadores. La porquería
televisada, aseguramos los que nos oponemos férreamente a la estupidez y la insociedad.
miércoles, 30 de septiembre de 2020
LA MUSICA DE ANTES ES TENDENCIA
Que la música cayó
verticalmente estos últimos 20 años, nos cansamos de sufrirlo día a día.
Escuchar estos equipos de autos que pasan con esas melodías que revientan los
oídos y la paciencia ya es clásico. Y hablando de clásico, paradoja: cada vez
más radios transmiten música de antes, 70, 80, 90. Bueno, en realidad la música
no tiene edad, si no pobres los compositores clásicos. Más allá de eso, las
emisoras y otras plataformas de contenido están prefiriendo los clásicos, esos
que otros suelen tirar abajo o tildar de antiguo, viejo, de otro tiempo, hasta
aburrido. Porque claro, hoy la música es cada vez menos tal. Porque más allá de
gustos, no me pueden decir que estos reguetones insufribles se puedan
considerar música. Música es obra, es cultura, es arte, es trabajo, no agarrar
un tema Rhythm of the Night y mandarle dos taradeces. O esos larguísimos
monólogos donde ni siquiera se pronuncia bien, estos portorriqueños que hablan
en japonés con la L por la R. Música es cultura, y la cultura, claro, no es la
onda. Parece que se está revirtiendo. Y si no, que haya nueva, pero buena.
Mientras eso no pasa, porque ya no pasa, tenemos los éxitos que tan bien nos
hacen a todos.